MotoGP llega a Tailandia: 5 claves sobre el Circuito de Burinam

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Conoce 5 claves del Circuito de Burinam aprovechando que MotoGP llega a Tailandia para disputar el segundo de los tres test de pretemporada programados antes del inicio del campeonato en Qatar. Un test diferente al resto, ya que además de seguir preparando las motos habrá que aprender todos los secretos que encierra este nuevo circuito. 

El calendario de MotoGP 2018 incluirá el GP de Tailandia como principal novedad dentro del mismo. Tendrá lugar en la época del tridente asiático, allá por el mes de octubre, y antes los pilotos de la categoría reina podrán testar las condiciones de este trazado que ya ha albergado competiciones de dos y cuatro ruedas. 

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1. Un circuito con muchas rectas

Como viene sucediendo con los últimos trazados diseñados por Hermann Tilke, el de Burinam es un trazado realmente rectilíneo, con tres grandes rectas incluida la de la línea de meta. Se trata de tres rectas que son, además, consecutivas entre sí. La más larga de todas ellas alcanza el kilómetro de longitud, por lo que se esperan grandes velocidades. ¿Se empiezan a frotar las manos en Ducati?

2. Una segunda zona más revirada

A partir de la curva 4 empieza otro circuito, con muchas curvas enlazadas entre sí y donde los pilotos y equipos deberán conseguir un buen compromiso entre potencia para las rectas y paso por curva en esta segunda zona. No parecen ser curvas exageradamente lentas, de manera que los pilotos llevarán, por lo general, una velocidad media bastante elevada. 

3. La línea de meta, próxima a la última curva

Pese a sus largas rectas, parece que será muy difícil ver que las carreras se resuelvan en la misma línea de meta como sucede en circuitos como Losail o Mugello. Todo hace indicar que la última curva (la 12) será el último punto de adelantamiento para luchar por la victoria, el podio o la posición antes de cruzar la bandera a cuadros. 

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4. Con capacidad para 100.000 espectadores

Uno de los grandes argumentos por los que MotoGP se ha decidido a acudir a Tailandia es por la enorme afición que existe en el país asiático. El Circuito de Burinam está construido en un complejo donde cualquier espectador puede ver lo que sucede en todos los puntos del circuito, ya que no hay ningún desnivel exagerado que dificulte la visión. Ya con el Mundial de Superbike se alcanzaron los 100.000 aficionados, cifra que en MotoGP se logrará con toda seguridad. 

5. El calor será uno de los mayores hándicaps

Como sucede con el Circuito de Sepang, el de Burinam tiene toda la pinta de que será un circuito en el que haga muchísimo calor, pero también donde la lluvia puede caer de forma intermitente. Esperemos que, en caso de lluvia, la pista drene bastante mejor con respecto al nuevo trazado de Malasia. Para el test de Tailandia se esperan temperaturas de hasta 35 grados.