Hay que remontarse a 2017 para encontrar el debut del McLaren 720S, pero eso no ha sido impedimento para que el superdeportivo británico siga dando lecciones dentro y fuera de la pista. Con esto en mente y sabiendo que su coche era un espectáculo, desde Woking han tenido clara la fórmula para su sucesor, el McLaren 750S.

Y es que el fabricante ha optado por tomar la realmente buena base que ya tenían y evolucionarla para ofrecer, simple y llanamente, un más y mejor. Según la marca, el 30% de los componentes son o bien nuevos o bien han cambiado.

Es por eso que resulta tan familiar, puesto que se ha creado a partir del 720S, mejorando todavía más su aerodinámica y haciendo un esfuerzo extra en lo que a peso se refiere. 

Así, el uso de materiales ligeros encabezados por el chasis monocasco de fibra de carbono hace que, si se incluyen todas las opciones ofrecidas por McLaren, pese en seco 1.277 kilos, lo que supone un ahorro de 30 kilos respecto a su predecesor. La versión descapotable, como es habitual, es más pesada (+49 kilos).

Y si la ligereza es uno de los dos componentes clave para conseguir grandes prestaciones, el otro es el del rendimiento, otra área en la que la mejora es notable.

Su corazón es el ya conocido motor 4.0 V8 biturbo, pero ha sido potenciado hasta los 750 CV y los 800 Nm de par máximo. Además, se asocia a una caja de cambios automática de siete velocidades que ha sido optimizada para mejorar la aceleración.

El resultado es que, acelera de 0 a 100 km/h en 2,8 segundos, alcanza los 200 km/h desde parado en 7,2 segundos (el Spider necesita 7,3 segundos), llega hasta los 300 km/h en 19,8 segundos (el Spider en 20,4), completa el cuarto de milla en 10,1 segundos (el Spider en 10,3) y alcanza una velocidad máxima de 332 km/h.

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McLaren 750S (6 imágenes)

Cuenta con frenos con discos cerámicos de carbono (390 mm delante, 380 mm detrás) mordidos por pinzas de freno de aluminio (6 pistones delante,4 pistones detrás), emplea amortiguadores adaptativos independientes, emplea un sistema de dirección electrohidráulico y calza neumáticos Pirelli P-ZERO de 245/35/R19 delante y de 305/30/R20 detrás.

Michael Leiters, CEO de McLaren Automotive, ha declarado: “Cuando tienes un coche reconocido por tantos conductores como una referencia, para hacer algo aún mejor tienes que examinar cada detalle y esforzarte de verdad para conseguir mejoras que vuelvan a poner alto el listón”.

“Esto es lo que hemos hecho con el nuevo 750S. Su ligereza, las prestaciones de su motor V8 y sus extraordinarias capacidades dinámicas se combinan para ofrecer una experiencia de conducción de supercoche que alcanza nuevas cotas, con niveles de conexión emocional realmente excitantes”, concluye.

El McLaren 750S ya ha abierto sus pedidos, pero no se ha desvelado su precio.