Lamborghini hace miel, pero no la puedes comprar

Que las marcas de coches se dedican a otros muchos menesteres que nada tienen que ver con el mundo de las cuatro ruedas es algo de sobra conocido. Sin embargo, siempre sorprende cuando alguna desvela alguna de esas áreas de trabajo y resulta que es bastante pintoresca. En este caso hablamos de Lamborghini, que también se dedica a hacer miel.

Es algo que sorprende, pero que todavía lo hace más por el motivo que ha llevado a la marca italiana a optar por este producto: la sostenibilidad.

Y es que, de cara a hacer que sus operaciones sean más sostenibles y compensar en el medio ambiente (modelos como el Huracán, el Lamborghini Aventador o el Lamborghini Urus no son precisamente eco), la firma optó por crear un enorme colmenar en el Lamborghini Park en 2016, con nada menos que 600.000 abejas. 

Estas se encargan de producir miel y la compañía calcula que anualmente genera unos 430 kilos que, eso sí, no podrás comprar, ni tú ni nadie, y es que Lamborghini la recolecta y se la regala a sus empleados cada Navidad. 

No es el único movimiento en esta dirección adoptado por la compañía, que también ha llevado a cabo otras acciones como la instalación de una planta fotovoltaica.

Por otro lado, cabe señalar que aunque parezca una ocupación pintoresca para una marca de coches, lo cierto es que hay bastantes fabricantes que tienen la apicultura entre sus tareas, sirviendo como ejemplo Porsche, Rolls-Royce o Bentley.

Empezando por la alemana, empezó con un apiario de 1,5 millones de abejas pero ya se ha expandido a más de 3 millones y ha llegado a un punto en el que produce 1.000 kilos de miel anuales. Además, al contrario que la de Lambo, esta sí que se puede adquirir.

En comparación la de Rolls es la más humilde en este campo, puesto que sus seis colonias “solo” albergan 300.000 abejas y su capacidad de producción de miel es también inferior.