El Jeep Grand Wagoneer resucitará después de 29 años

El que Jeep Grand Wagoneer resucite después de 29 años casi no es noticia en un mundo poblado por SUV cada vez de mayor tamaño, especialmente, en EEUU, lo que es raro raro es que la marca no haya decidido antes emprender una reedición de un modelo que parece más actual ahora incluso que cuando dejó de fabricarse, allá por el comienzo de los 90. 

Eso sí, debido a los problemas que el Coronavirus ha traído a la producción de coches en EEUU, todo plan de producto se ha retrasado sine die y, prácticamente nadie, ha podido aventurar si tal o cual modelo iban a llegar a pisar las calles finalmente. Eso sí, tras la escueta publicación en Twitter de los primeros detalles del que será el nuevo Jeep Grand Wagoneer la cosa ya toma un cariz oficial. 

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A pesar de que la publicación en la red social carezca completamente de texto, más allá de las letras ‘EER’ junto a la bandera de los EEUU colocada sobre la chapa del que será el Jeep Wagoneer del siglo XXI. Si se atiende a otra publicación en la cuenta de Twitter de Jeep en Norteamérica del 10 de agosto, que esa vez iba sin fotos de coche, pero sí con texto, el objetivo de la marca está claro. 

‘Grande, Grande: magnífico y llamativo en apariencia, tamaño y estilo’, eran las palabras de la marca para referirse, supuestamente, a la resurrección del Jeep Wagoneer. Por este motivo, colocamos una imagen del predecesor como principal de la noticia y es que durante los 70 y 80, el Wagoneer fue el no va más de los SUV americanos en tamaño.

De hecho, en EEUU ya especulan incluso con un Wagoneer y con un Grand Wagoneer, ya que en su día existió uno, que allí fue algo así como el Range Rover de inicio de los 80. De ahí que ya haya quien esté hablando de un botón de encendido forrado en cuero y demás acabados de lujo dado que ya no estamos en el siglo de ponerle cuernos a los pasos de rueda o colgar un escroto de toro del diferencial trasero. 

Así, se supone que el nuevo Wagoneer deberá construirse sobre la plataforma del Ram 1500. Es decir, será un SUV con tres filas de asientos y un potente motor V8, nada de italianadas bajo el capó de un coche que lleva la bandera de EEUU, aunque a buen seguro sí habrá alguna mecánica Multijet en opción al fin y al cabo.