Europa da un paso más para la aprobación definitiva del veto a la combustión en 2035 (con los e-fuels incluidos)
El Consejo de Ministros de Energía tiene hoy la última palabra sobre el veto a la combustión
Los 27 países que forman parte de la Unión Europea (UE) han aceptado el acuerdo alcanzado entre Bruselas y Alemania. De esta forma, Europa avanza en la aprobación definitiva del veto a la combustión en 2035 con la inclusión de los e-fuel entre las opciones admitidas.
La prohibición de fabricación y venta de vehículos diésel, gasolina y de gas a partir de 2035 era prácticamente un hecho hasta hace unos días. Alemania empezó a hacer públicas sus reticencias sobre una medida que consideraba demasiado estricta ya que, a priori, únicamente dejaba dos alternativas de movilidad abiertas: los coches eléctricos de batería y los de hidrógeno.
E-fuel, esto es lo que se espera que cueste el nuevo combustible sintético a partir de 2024
La oposición de Alemania, unida a la de otros países como Italia, que empezaba también a dudar, y Polonia que ya había dicho no en votaciones anteriores, ponía en serio peligro la aprobación del nuevo Reglamento. Esto hizo que Bruselas decidiera pactar con el gobierno alemán y aceptar su petición de incluir los sintéticos entre los combustibles libres de veto.
La petición de Alemania de incluir los combustibles sintéticos, también conocidos como e-fuels entre las opciones de movilidad admitidas en 2035 se ampara en la propia redacción del borrador europeo que establece que "solo se podrán vender vehículos que no emitan CO2". Los sintéticos son combustibles neutros en emisiones por lo que cumplen el requisito.
Queda la votación definitiva
El acuerdo alcanzado entre Bruselas y Alemania fue bilateral por lo que debía ser aprobado por el resto de países miembros.
Los 27 embajadores europeos reunidos ayer, 27 de marzo, votaron a favor de la inclusión de los combustibles sintéticos en la norma para así avanzar en la aprobación del veto a la combustión en 2035. Italia y
El acuerdo de los 27 incluye la propuesta de prohibir la fabricación y venta de vehículos diésel, gasolina y de gas a partir de 2035 en la agenda del Consejo de Ministros de Energía europeos que se celebra hoy mismo.
Ahora que el respaldo de Alemania está asegurado, se espera que el reglamento salga adelante con la oposición de Italia y Polonia y, muy posiblemente, la abstención de Bulgaria.
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