La Diputación de La Coruña reclama 485 euros por “asistencia y limpieza” a un motorista que falleció al ser arrollado
El 9 de agosto de 2020, un vehículo invadió el carril contrario al entrar en una curva con exceso de velocidad y arrolló a un motorista, que falleció. Ahora, la Diputación de La Coruña reclama 485 euros en concepto de “asistencia y limpieza” de la vía al fallecido.
Hace tres años, un motorista falleció en un accidente de tráfico tras ser arrollado por un vehículo en la carretera AC-442, a su paso por la localidad de Dumbría, en la provincia de La Coruña. Ahora, la Diputación de La Coruña le reclama 485 euros por “asistencia y limpieza”.
El siniestro se produjo el 9 de agosto de 2020, cuando el fallecido, Josep Boan Rosanes, de apenas 20 años, y su padre se dirigían a Santiago en lo que era la última etapa de un viaje por Galicia que habían iniciado en Barcelona, donde residían.
Mientras circulaban por la carretera AC-442, un turismo invadió el carril contrario en una curva y colisionó con la moto a la altura del municipio de Dumbría, perdiendo la vida el joven. El conductor del vehículo fue condenado a dos años de cárcel por invadir el carril contrario.
La Diputación de A Coruña reclama 485,5 euros por “asistencia y limpieza” a un motorista que falleció al ser arrollado
Más de tres años después, la Diputación de La Coruña ha emitido una factura al fallecido en concepto de “asistencia y limpieza” de la calzada por el accidente, lo cual ha generado estupefacción en la familia.
El Consorcio de Bomberos aseguró que procedería a anular la multa al fallecido para cargársela al conductor del vehículo que provocó el accidente. Cuando ocurrió el siniestro, carecían de los datos suficientes para dirimir la responsabilidad y, por este motivo cargaron la factura al fallecido por error.
Inmediatamente después de conocer los hechos, la Diputación de A Coruña inició la anulación de la tramitación de la multa y pidió disculpas a la familia por lo sucedido.
Un calvario judicial de más de dos años
Según el equipo de la Guardia Civil de Tráfico que investigó el accidente, el vehículo, un Peugeot, entró demasiado rápido en la curva y perdió el control, arrollando la moto: “En el momento en que perdió el control, circulaba a 116 km/h como mínimo, en una zona limitada a 70 km/h”.
El conductor del vehículo, Asier G. S., de 30 años, natural de la localidad coruñesa de O Pino, negó que circulase tan deprisa, pero las huellas del accidente y los restos en la carretera no dejaban lugar a dudas.
Además, el tramo estaba perfectamente señalizado con una señal de limitación situada 300 metros antes de la curva, la vía estaba seca, limpia y en buen estado de conservación, la visibilidad era buena y las condiciones atmosféricas favorables.
Una vez celebrado el juicio, el juez emitió en diciembre de 2022 una sentencia condenatoria por homicidio imprudente grave. Concretamente, el conductor fue condenado a dos años de cárcel y la retirada del carné de conducir durante tres años y seis meses, así como a la inhabilitación especial para el ejercicio del derecho de sufragio pasivo durante el tiempo de la condena.
Sin embargo, la sentencia fue insuficiente para la familia, al considerarla poco ejemplarizante, ya que no restituye el daño causado ni el conductor del vehículo ha mostrado tampoco arrepentimiento. Además, al ser una pena inferior a dos años, no tendrá que ingresar en prisión.
Etiquetas: Accidentes de coches
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