La DGT despliega 30 nuevas cámaras para controlar la ITV en los coches

La DGT tiene 30 nuevas cámaras para detectar coches sin la ITV o sin el seguro en vigor. Hasta el día 26, Tráfico está llevando a cabo una campaña especial de vigilancia del estado de los vehículos por medio de este sistema, pero en la que también van a inspeccionar visualmente los neumáticos, la iluminación y otros aspectos técnicos de coches que inciden en su seguridad.

Según los datos de la DGT, en 2016, el 6% de los coches envueltos en un accidente mortal circulaban con la ITV caducada - esta proporción ascendió al 9% en el caso de furgonetas- y otros 2.300 coches sin la inspección en vigor se vieron envueltos en algún siniestro con víctimas.  

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Por este motivo, la vigilancia de Tráfico a los coches sin ITV se está intensificando y en 2019 se cursaron hasta 500.000 denuncias a turismos sin la inspección técnica, que representan el 1,6% de los vehículos controlados. La multa por no tener al día la ITV asciende a 200 euros (100 euros con reducción), la misma cuantía que la sanción por llevar los neumáticos en mal estado.

Pero en los controles de ITV de la Guardia Civil de Tráfico que se están llevando a cabo en toda España también se revisan otros elementos, principalmente, que la profundidad de las ruedas no esté por debajo del mínimo legal  (1,6 mm), si bien la DGT aconseja que las cubiertas tengan al menos 3 mm en su dibujo.

Los neumáticos, grandes olvidados

Para Tráfico, los neumáticos son los grandes olvidados del coche a pesar de que son los encargados de transferir las fuerzas que controlan el vehículo como el empuje, la frenada o el guiado lateral en curva. Según datos oficiales, un millón de coches circulan a diario por España con la profundidad del dibujo en sus ruedas por debajo del límite legal. 

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Y esto no es lo único que hay que revisar en las ruedas porque que presenten un desgaste irregular, una alineación incorrecta o circular con una presión errónea en los neumáticos no solo puede ser también motivo de sanción, sino que es una práctica que reviste un gran peligro. Para la DGT, un claro objetivo son las furgonetas, puesto que han detectado que son los que presentan un mayor índice de defectos en los neumáticos. 

Otros de los elementos que se están revisando en los controles de vehículos de la DGT es el alumbrado, que no solo sirve para ver bien, sino también para ser vistos. Tráfico recomienda cambiar las lámparas del coche cada 40.000 km o cada dos años, ya que se trata de un elemento que se desgasta y pierde luminosidad. Por otro lado, la Guardia Civil también revisa en carretera que los faros estén limpios. 

Entre otras condiciones de los vehículos que se verifican en los controles de Tráfico también están el parabrisas, que no debe presentar daño alguno; la documentación del coche, permiso de circulación, tarjeta de la ITV y pegatina correspondiente; y la matricula del vehículo. Llevar la matrícula ilegible es una sanción que se considera grave y que conlleva una multa de 200 euros. 

Mucho más grave sería que la Guardia Civil encuentre que se ha manipulado la placa de matrícula del coche, sanción que conlleva 6.000 euros de multa y la pérdida de seis puntos del permiso de conducir.