Los carteros de esta ciudad española piden retirar un radar porque no pueden repartir tantas multas

Si nos referimos a los radares, hay dos cosas que están claras. La primera es que a muchos conductores les parecen algo tediosos, y la segunda es que son necesarios para que la gente no sólo cumpla con los límites de velocidad, sino también para preservar la seguridad vial en las carreteras. 

Pero, en el caso de Lugones, una localidad de Siero (Asturias), la situación es diferente. Y es que se han instalado nuevos radares en la zona del Ayuntamiento que imponen de media más de 300 sanciones al día por exceso de velocidad. Te lo contamos. 

Un radar de Asturias recopila cientos de multas diarias 

Los nuevos radares de la localidad asturiana están poniendo, como decimos, una media de 300 multas. Y esto hace que el servicio de Correos se está viendo colapsado. De hecho, un trabajador de uno de los servicios de Correos de la localidad ha confirmado a La Nueva España que los trabajadores de turno de tarde han pasado a dedicar toda su jornada a entregar las notificaciones de multa a los vecinos. 

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El trabajador ha subrayado que se ha dado el caso de que un residente ha recibido hasta 16 avisos de sanción en tan sólo un día. Entre algunas de las voces de los conductores, destaca la idea de que la instalación de dichos radares no tiene otro fin más que ser un “afán recaudatorio” por parte del concejo. 

Ángel García, alcalde de Lugones, se disculpó por la instalación de radares a principios de año, respondiendo a las quejas de los vecinos por exceso de velocidad. Aunque niega el afán recaudatorio, reconoce el malestar generado y la posibilidad de haber tomado otras medidas. 

“Esta situación me genera malestar y pido disculpas en lo que se refiere a mi posición como Alcalde. Quizá teníamos que haberlo hecho de otra manera, o no poner los radares, pero también teníamos que tomar medidas con respecto a la cantidad de quejas y denuncias que nos llegaban de los vecinos por excesos de velocidad”, ha declarado García al medio mencionado. 

Desde el 8 de enero se han instalado un total de nueve cajas nuevas de radares, con dos cinemómetros rotativos, las cuales han registrado 15.000 multas por exceder el límite de 30 km/h. Las sanciones se distribuyen mayormente en el rango de 48 a 50 km/h (60%), seguido por 50 a 60 km/h (35%), 60 a 70 km/h (4%) y más de 70 km/h (1%), con retirada de puntos del carné a partir de los 51 km/h.

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El Ayuntamiento retira el radar con más multas recopiladas 

El radar que más multas ha puesto hasta la fecha es el que se encuentra ubicado en la avenida de ‘Les Bellotines’. Entre los afectados se encuentra Rosa Alonso que, tal y como ha informado a La Nueva España, ha recibido un total de nueve multas, y calcula que le falta por llegar otras 40 más. 

“Paso por esa zona dos veces al día, para ir y para volver a mi lugar de trabajo. Si contamos que febrero ha tenido 29 días, eso me supondrá cerca de 2.000 euros en multas", ha afirmado. “Llevo diez años circulando a 50 kilómetros por hora por ese tramo para ir a trabajar y, de repente, el Ayuntamiento decidió en algún momento indeterminado colocar un radar que no ves y sin previo aviso", ha añadido. 

Los vecinos de la zona critican la aplicación de la normativa, así como la califican de "mala fe", mientras el alcalde Ángel García defiende la legalidad de las medidas. Argumenta que la Dirección General de Tráfico (DGT) establece un límite de 30 km/h en zonas urbanas y que las acciones municipales llevadas a cabo responden ante la falta de concienciación de los conductores. 

El Alcalde ha lamentado informar que, pese a que la situación está resultando “muy desagradable” para el resto de vecinos, es algo que depende de Tráfico. Sin embargo, ante la gran cantidad de multas repartidas, se ha decidido retirar el radar de Les Bellotines.