¿Nos hemos vuelto locos? Comparativa del Kia Ceed GT vs Mazda MX-5 y Subaru BRZ
Motorizaciones comparadas:
¿Algo rápido y fácil? Los tres coches que hoy traemos aquí cumplen esas dos premisas. Esta es la comparativa del Kia Ceed GT vs Mazda MX-5 y Subaru BRZ. ¡Y los metemos en el circuito de Lausitzring!
En 1989, Mazda revivió el soñoliento mercado del roadster. Y 30 años después, el Mazda MX-5 vuelve a estar solo. El modelo de aniversario naranja brillante "30th Anniversary" casi parece un canto de cisne.
El Subaru BRZ, el gemelo del Toyota GT86, es otro de esos que rechazan seguir la tendencia. Está pensado para ser un coche radicalmente deportivo.
El Kia Ceed GT es un representante de la modernidad. Con un motor turbo de 1,6 litros, ruedas de 18 pulgadas y escape de válvula, el vehículo compacto parece ligeramente deportivo, pero en ningún caso agresivo.
Y por dentro...
En el Mazda, los detalles en naranja son el hilo conductor de esta versión Anniversary. Clásico el habitáculo Subaru: claramente estructurado, intuitivo de operar, sin lujos, pero con un volante perfectamente manejable, los ocupantes se sientan muy abajo en asientos bien formados y disfrutan de una excelente posición.
Los asientos del Ceed GT brindan un buen soporte y son cómodos, el práctico volante adula tus manos. Al igual que en el Subaru, los asientos en el Mazda también ofrecen mucho soporte lateral. Lo que los dos aún tienen en común es una reliquia de la época de la conducción artesanal e independiente: la palanca del freno de mano mecánico entre los pasajeros.
¡Al circuito!
El atmosférico de 184 CV funciona si esfuerzo en el Mazda, y supera las 7.000 vueltas. Siempre responde deportivo, casi aserrado, con su música adictiva. La suspensión se lleva un leve tirón de orejas porque a veces golpetea un poco, y debido a que el modelo especial también utiliza discos pequeños convencionales, a pesar de las gruesas pinzas Brembo, la pérdida del frenada es plausible cuando lo llevas al máximo. Sin embargo, en esta comparativa, el pequeño japonés logra el mejor tiempo en Lausitzring con 1: 46.92 minutos.
El BRZ es propulsado por un bóxer de cuatro cilindros y dos litros (200 CV, 205 Nm). El motor podría ofrecer un poco más de agallas. Un turbo o compresor funcionaría de maravilla.
Al BRZ le falta un poco de fuelle cuando lo llevas a tope en recta, aunque la relación de transmisión corta y el cambio de marchas duro y preciso te ayudan a aprovechar su escaso abanico de revoluciones. Y en los tramos de de Lausitzring es un sueño estrujar este bóxer, extraerle cada CV de forma individual, embestir la siguiente marcha aún más rápido.
VÍDEO: Alucina con este Mazda MX-5 en acción
Luego vienen las curvas, y rápidamente se vuelve claro: al BRZ no le van las trayectorias alineadas. Es el que antes llega al drift, no es posible conducir con más diversión, a pesar de un motor algo plano. Con un tiempo de 1: 48.39 minutos, sin embargo, ha sido el último.
El motor turbo del Ceed (204 CV, 265 Nm) empuja casi sin pensárselo, para ser un 1,6 es realmente poderoso. Llega con entusiasmo las 6.000 vueltas, aunque luego pierde fuelle, de modo que lo mejor es cambiar en cuanto la aguja alcanza esta marcha.
El Kia está ajustado de manera convincente: suspensión firme y amortiguación poderosa. El motor y la palanca de cambios funcionan sin contratiempos y de forma equilibrada en el circuito, empujando el Ceed entre Mazda y Subaru con un tiempo de 1: 47.92 minutos.
Particularmente agradable: a pesar de toda la deportividad, hay suficiente comodidad residual para que no sea molesto en la vida cotidiana. Como se esperaba, el Kia tiene la ventaja en estas lides.
Descubre más sobre AutoBild, autor/a de este artículo.
Conoce cómo trabajamos en Autobild España.