Comparativa: Jaguar F-Pace P400e AWD vs Volvo XC60 Recharge T6 AWD
¿De qué son capaces el Volvo XC60 y el Jaguar F-Pace como híbridos enchufables? Eso es justo lo que vamos a responder enfrentándolos en esta comparativa
Motorizaciones comparadas:
¿Realmente siempre tiene que ser Audi, BMW o Mercedes cuando hablamos de SUV premium? Aquí tenemos dos alternativas: el Jaguar F-Pace P400e AWD y el Volvo XC60 Recharge T6 AWD.
Diseño
Ambos tienen un diseño cuidado, elegante e independiente. El Volvo tiene la ventaja de tener más espacio, ofreciendo unos centímetros más de libertad de movimiento que el Jaguar prácticamente en todas partes sin que quede haya apreturas en ninguna parte a bordo.
Los asientos delanteros del F-Pace están acolchados suavemente y no ofrecen mucho apoyo lateral, la segunda fila también es muy confortable. El Volvo de la prueba tiene los asientos deportivos opcionales en la parte delantera y los recomendamos encarecidamente: firmes y cómodos, antideslizantes y bien contorneados. Sin embargo, la segunda fila no es tan cómoda como la de su rival, la banqueta es demasiado corta.
En el maletero del sueco caben de 468 a 1.395 litros, el Jaguar tiene de 485 a 1.299. Pero el F-Pace solo puede cargar con un máximo de 415 kilogramos, insuficiente en esta liga. El XC60 alcanza los 497 kilos.
Volvo y Jaguar, al nivel de la competencia alemana
Ambos coches tienen unos acabados limpios, con materiales de alta calidad y atractivos detalles, y por lo tanto están totalmente a la par con la competencia alemana. El Jaguar es el más refinado y noble, el Volvo es fresco, claro… y muy escandinavo. Cuestión de gustos.
Los dos se basan en monitores de pantalla táctil para el control de las funciones. La pantalla de 11,4 pulgadas del F-Pace está ligeramente curvada, es muy práctica y tiene un aspecto atractivo. Pero los menús están demasiado anidados, y el control de voz solo responde a comandos predefinidos, de modo que la búsqueda de puntos de interés es difícil.
Volvo ahora funciona con Google Android y ha simplificado los menús del monitor de nueve pulgadas. Todo funciona bien, elogio especial merece el sistema de navegación de Google Maps; sin embargo, debe estar siempre ‘online’, y no siempre es así, y la gama de funciones se ve severamente restringida. El control por voz a través de "Ok Google" reacciona con mayor rapidez y flexibilidad que en el Jaguar.
Los motores del Jaguar y el Volvo
El sistema híbrido del F-Pace incluye un motor de gasolina de cuatro cilindros y 2.0 litros instalado longitudinalmente con 300 CV, un motor eléctrico con 143 CV, una batería de 13.8 kWh y la transmisión automática de ocho velocidades de ZF; el rendimiento del sistema es de 404 CV.
El Jaguar se puede cargar con corriente alterna de 7 kW e incluso con corriente continua de 32 kW; esto es raro con los híbridos enchufables y es una ventaja sobre el Volvo, donde son posibles un máximo de 3,7 kW.
En el XC60 T6, el sistema híbrido incluye un motor de gasolina de cuatro cilindros y 2.0 litros montado transversalmente y sobrealimentado, con 253 CV, un motor eléctrico de 145 CV, una batería de 14,9 kWh y una transmisión automática Aisin de ocho velocidades. La potencia del sistema es de 350 CV.
Ambos coches son sorprendentemente rápidos, con tiempos de poco más de cinco segundos para el sprint de cero a cien que hablan por sí solos, notable para los SUV de este tamaño y peso. El Volvo está típicamente limitado a una velocidad de 180 km/h, el Jaguar corre con relativa facilidad hasta los 240.
Comportamiento de los dos SUV
La combinación de motor y transmisión en el Volvo funciona de manera más armoniosa que en el Jaguar, responde más rápido y de manera más directa. Y el XC60 se puede conducir en modo de un pedal, desacelerando hasta detenerse, algo que es raro en los híbridos enchufables. El motor de gasolina está bien aislado y si escuchas algo, es un poco como el silbido de un V6, lo que es muy agradable.
El Jaguar actúa de manera más indecisa en general, especialmente cuando la batería está vacía. Luego, el sistema necesita algo para resolverse, y se sacude de vez en cuando. Aquí, también, el motor de gasolina está cuidadosamente aislado y lo que escuchas suena agradablemente ronco.
El F-Pace pesa 112 kilogramos más que el ya pesado XC60 y se siente exactamente igual: enorme. Jaguar lo ha afinado suavemente, y es mejor llevarlo relajadamente con su dirección de respuesta retardada: eso encaja perfectamente con su enfoque confortable.
En comparación directa con el Jaguar, el XC60 se siente más pequeño y ágil, sin embargo, la dirección suave, desacoplada y ligeramente sensible a los golpes ofrece margen de mejora.
El XC60 de la prueba estaba equipado con la suspensión neumática adaptativa opcional. Esto ofrece la ventaja del ajuste de altura en el modo todoterreno, pero no responde con especial sensibilidad, especialmente en ondulaciones cortas como adoquines. El Volvo sí acumula puntos con sus frenos: 34 metros para detenerse en caliente desde los 100 km/h, frente a los 35,4 del Jaguar.
De forma puramente eléctrica, recorrimos 43 kilómetros con el F-Pace en la prueba, con el Volvo fueron 64. Incluso con la batería descargada, el sueco siguió siendo más económico, llegó a un consumo de 8,8 litros, y el Jaguar a los 10,9.
La buena noticia: a diferencia de muchos otros híbridos enchufables con sus mini depósitos, ambos tienen reservas de combustible decentes: el XC60 tiene 71 litros, el F-Pace, 69.
Factores para decidir la compra
Puesto 1: Volvo XC60 Recharge T6. Tiene mucho espacio y el sistema híbrido es más armonioso. Muy buenos frenos. Precio alto.
Puesto 2: Jaguar F-Pace P400e. Un interior decididamente refinado y elegante y un gran confort de conducción hablan a favor del Jaguar. Es incluso más caro que el Volvo.
Etiquetas: SUV, SUV de lujo
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