Comparativa: 6 pequeños SUV del segmento de moda

Un acceso cómodo, postura elevada y, aun así, sin problemas para aparcar. Los "mini SUV" lo hacen posible. Te traemos seis de los que dominan el mercado, y los enfrentamos en esta comparativa de 6 pequeños SUV del segmento de moda: Opel Crossland X, Hyundai Kona, Seat Arona, Mazda CX-3, Fiat 500X y Dacia Duster.

Puesto 6 con 447 de 750 puntos: Dacia Duster SCe 115

¿Cómo lo consigue Dacia? Ofrecen, con el Dacia Duster, un SUV de 4,34 metros de largo que realmente podría competir en el segmento superior. Y piden por él poco más de 10.000 euros en su versión básica. Ya solo esto, impide que nos decepcione entrar en un habitáculo dominado por plásticos duros, una pantalla del navegador demasiado hundida, y una distancia excesiva entre el asiento y el umbral excesiva, o un recubrimiento del maletero de un fieltro a todas luces barato.

VÍDEO: ¡El Dacia Duster en acción!

¿Y qué más da? No gusta el diseño de la carrocería del Duster, uno se sienta alto y desahogado, y con entre 445 y 1.478 litros, tiene el maletero más capaz de esta comparativa. Y cuando lo conduces, te llevas una sorpresa. De acuerdo que el motor atmosférico de cuatro cilindros y 114 CV es algo perezoso, y hay que llevarlo alto de vueltas para sacarle algo de brío. Y entonces se vuelve demasiado ruidoso, y su consumo de 7,2 litros, aunque es excesivo, no le deja en el mejor lugar.

Pero volvamos a la sorpresa: y es que no nos esperábamos que fuera tan confortable en marcha. Tiene un chasis muy a la francesa, de tarado suave, y siempre que no lo lleves a velocidades muy elevadas, los balanceos no resultan excesivos y filtra bien los baches. Y rodo esto, en un interior espacioso.

Puesto 5 con 477 de 750 puntos: Fiat 500X 1.0 GSE

Lleva cuatro años en el mercado, pero el Fiat 500X sigue teniendo un aspecto irresistiblemente moderno, especialmente tras el reciente lavado de cara. Eso le ha proporcionado un interior aún más 'chic', más asistentes y un nuevo motor de un litro, tres cilindros y 120 CV. En el cockpit hay detalles lacados, un volante grueso, y un navegador... Algo minimalista, en formato 'smartphone'.

Al menos, está situado a la altura del campo de visión. El interior es desahogado, aunque no nos ha gustado el sistema para plegar la fila trasera, que obliga a hacerlo con una mano mientras sostienes el cinturón de seguridad con la otra. Una vez en marcha, el motor vibra bastante, y consume demasiado: hemos medido 7,9 litros.

La suspensión es algo rebotona, y la dirección, algo difusa. Pensamos, sinceramente, que una estética tan sumamente 'cool' se merece un chasis más afinado.

Puesto 4 con 491 de 750 puntos: Mazda CX-3 Skyactiv-G 121

Pues sí, aún existen motores de cuatro cilindros sin turbo, que compensan la falta con una cilindrada elevada. El 2,0 litros de 121 CV logra que el Mazda CX-3 sea el que antes acelera de 0 a 100 km/h de la comparativa (9,4 segundos) y además tienen un consumo contenido de siete litros.

Una pena que el chasis no vaya acorde con un motor tan logrado, y es que peca de falta de confort por su falta de equilibrio. El blando eje delantero tiende a hundirse demasiado al superar irregularidades del asfalto, y sobre los baches golpetea más de lo debido. Y es una pena, porque su diseño exterior e interior transmite deportividad, y dan ganas de más. Tanto es así, que es un SUV por lo pelos: con 580 mm respecto al suelo, tiene la postura al volante más baja, 100 mm menos que el Fiat 500X.

Y debido a la inclinada línea del techo, el espacio en las plazas traseras es algo justo y el maletero se conforma con entre 350 y 1.260 litros. Pero sinceramente: su excelente motor y estética tan atractiva lo compensan.

Puesto 3 con 493 de 750 puntos: Opel Crossland X 1.2 Turbo

Un 1,2 litros de gasolina con buen empuje. Por desgracia, es bastante angosto en las plazas traseras. Por fuera Opel, por dentro Peugeot, el Opel Crossland X es el primer retoño de la alianza francoalemana. Como opción, por en torno a los 400 euros, puedes adquirir una banqueta trasera deslizable y con el respaldo abatible.

Y por unos 700 más, tienes los siempre recomendables asientos AGR con regulación en la zona de los muslos. Nos ha gustado mucho su cockpit claro con algunas superficies mullidas, la sensación de desahogo delante y su gran maletero: de 410 a 1.255 litros. El 1,2 litros es muy divertido gracias a su ancha gama de revoluciones, empuja con brío y, por desgracia, también tiene un sonido tosco, y con 7,2 litros, no es el más ahorrador.

Pero el chasis no digiere bien el ritmo: carrocería elevada más una distancia entre ejes escasa lo convierten en una suerte de balancín. Nuestro consejo: realizar una conducción relajada. Y no solo porque irás más cómodo, sino porque sus frenadas de 100 km/h a 0, 37,9 metros en frío y 36,7 en caliente, no invitan a muchos desvaríos.

Puesto 2 con  495 de 750 puntos: Hyundai Kona 1.0 T-GDI

Casi es más un pequeño monovolumen que un SUV. Tiene mucho espacio y mucho empuje, por desgracia, su chasis es nervioso. Si sabes que vas a conducir por carreteras lisas en buen estado, sin duda, te recomendamos el Hyundai Kona. Pero si tus recorridos habituales van a ser por baches y socavones, vete concertando cita con tu ortopeda.

Y es que el Kona ha sido desarrollado por Albert Biermann, proveniente de BMW, y se ha pasado con el tarado duro del chasis. Esto lo puede compensar con su practicidad: el maletero sin cantos tiene un doble suelo con compartimentos. Por otro lado, el cockpit es claro e intuitivo, y los asientos, muy cómodos. Pero su as en la manga está en su imbatible garantía de cinco años. El tres cilindros es austero con 7,0 litros, pero tienes que subirlo de vueltas pata extraerle algo de viveza.

¿Por qué no gana? Por su chasis, demasiado duro. Si no, se haría con el primer puesto.

Puesto 1 con 520 de 750 puntos: Seat Arona 1.0 TSI  

Pues el Seat Arona es de esos coche tan redondos que no sabemos muy bien qué mejoraríamos. Tal vez ubicaríamos la pantalla del navegador un poco más arriba, pero, ¿por lo demás? El maletero cubica entre 400 y 1.280 litros, los asientos son cómodos, tanto delante como detrás, la sensación de bienestar dentro, con sus amplias superficies acristaladas, es muy elevada.

El 1,0 litros de tres cilindros es el más ahorrador de la comparativa con los 6,5 litros que hemos medido. Y aunque mide 4,14 metros, es tan ágil que, al volante, parece aún más pequeño. Con sus 9,6 segundos para pasar de 0 a 100 km/h, solo el Mazda es un poco más rápido.

Y a su favor, tiene un chasis muy equilibrado, que logra la combinación idónea entre dinamismo y viajes confortables. Realmente no sabemos qué criticar de este coche. A no ser... ¿Por qué solo le dan dos años de garantía a un coche tan bueno?

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