Cinco formas de reducir la mortalidad infantil en carretera
Nacho de Haro
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Aquí tienes cinco formas de reducir la mortalidad infantil en carretera. No te vamos a descubrir nada nuevo, son una serie de consejos que ya deberías aplicar en tu día a día, tanto si conduces habitualmente con niños en el coche, como si no. Son sencillos, pero merece la pena que les prestes atención, sobre todo si tenemos en cuenta que a lo largo del pasado año, 25 menores de 14 años perdieron la vida en accidentes de tráfico en nuestro país.
Todo lo que hagamos para ayudar a reducir la mortalidad infantil en nuestras carreteras es poco, todavía tenemos que mejorar mucho. La prueba está en que España, como en otras muchas cosas, también está a la cola de la Unión Europea en lo referente a víctimas de accidentes de tráfico menores de 15 años. Según el ‘Informe sobre Seguridad Vial en las Carreteras Europeas’ elaborado por DEKRA, únicamente Eslovenia está por detrás.
1- Todo en orden antes de arrancar
Los que habitualmente viajan en el coche con niños, especialmente si es más de uno, sabrán que es realmente complicado lograr hacer todo a tiempo. Pero debes recordar que ellos no tienen la culpa de nada, es responsabilidad del conductor asegurarse de que todo esté en orden antes de arrancar, cumpliendo con todas las normas de tráfico, como las referidas al uso de sillas infantiles, antes de iniciar la marcha.
2- La educación es la clave
Iniciativas como la de Volvo para llevar la seguridad vial a los colegios o como el Plan Joven de Seguridad Vial de Michelin deberían ser más comunes. La educación es fundamental para reducir la mortalidad infantil en carretera. La enseñanza de normas básicas, como no desabrocharse el cinturón durante el trayecto, corresponde fundamentalmente a los padres, pero los centros educativos y las diferentes instituciones también tienen que poner su granito de arena.
3- Distracciones, las justas
Expresiones como “¡tengo sed!” o “¿cuánto queda?” pueden provocar nuestra distracción, pero, al fin y al cabo, son situaciones que escapan de nuestro control. Lo único que podemos hacer es reaccionar de la mejor manera posible, incluso parando el vehículo si es necesario (y obviamente, siempre en lugares donde esté permitido). Lo que no se nos debería escapar son cosas como el uso del teléfono móvil mientras estamos al volante, eso es inadmisible.
4- Mantenimiento al día
Dios quiera que no, pero imagina que por no haber cambiado los neumáticos en su debido momento sufres un accidente con tus hijos a bordo, ¿a que te arrepentirías de no haberlo hecho antes? Seguro que sí. Así que ya sabes, respeta los intervalos de mantenimiento estipulados por los fabricantes.
5- Todavía más precaución en zonas escolares
Mucho ojo con los menores que van a pie o en bicicleta. Si sabes que tus hijos van a estar cerca de zonas de tráfico rodado, lo mejor será que les vistas (si es que se dejan) con prendas de colores llamativos, para que puedan ser divisados con mayor facilidad.
Fuente: DEKRA
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