Prueba Toyota Corolla 180H GR Sport: ¿más deportivo o más híbrido?

Las nuevas formas de movilidad se están imponiendo a una velocidad muy superior a lo esperado hace solo unos pocos años. Que si híbridos, que si coches eléctricos, enchufables, mild hybrid... Si ahora quieres cambiar de coche y te planteas algo más eficiente, este Toyota Corolla 180H GR Sport que he probado y su nuevo acabado puede ser una buena opción.

Toyota Corolla GR-Sport, ya a la venta desde 26.750 euros

Desde luego es un coche que entra por los ojos, ya que el nuevo acabado GR Sport lo ha refrescado y convertido en un modelo mucho más atractivo. Aunque eso es subjetivo, porque puede que a ti te resulte incluso demasiado agresivo.

VÍDEO: Este es el renovado Toyota Corolla 2018:

El acabado más deportivo de la gama

Toyota ofrece en su Corolla dos mecánicas, un 1.8 de 98 CV, que unido a un eléctrico de 53 kW (72 CV) logran una potencia conjunta de 122 CV;  y este que aquí nos ocupa, y que equipa un motor 2.0 de 152 CV, que alcanza los 184 CV gracias al apoyo del eléctrico de 80 kW (109 CV). En el caso del nuevo y deportivo acabado, solo estará disponible con este último, el más potente. Y aunque no fuera así, también yo hubiera optado por el más potente, sobre todo, porque su respuesta en carretera es mucho más contundente. Y eso que el uso de un híbrido puro (no enchufable) como este tendrá su principal ámbito de actuación en ciudad, por lo que sería más sensato y lógico el 125H, pues ofrece energía de sobra para su entorno habitual y el gasto medio es más contenido.

Pero como el objetivo de esta prueba es ver cómo le sienta el nuevo acabado al 180H, pues aquí está.

Prueba del Toyota Corolla 180H GR Sport

Por fuera, ya lo ves, mucho más agresivo que las otras terminaciones. Y es que este está destinado a "clientes jóvenes y entusiastas, apasionados de la competición" (o eso dice Toyota). Para ello tiene muchos elementos de lo más deportivo, como su nueva parrilla frontal exclusiva con un acabado cromado oscuro, faldones inferiores en los laterales de la carrocería, logo Toyota en negro a pesar de ser un híbrido (el resto de estos modelos llevan los logos con fondo azul) y un difusor trasero. 

Esta nueva versión de la gama Toyota Corolla cuenta, además, con llantas de aleación de 18" con moldura roja alrededor del logo Toyota, luneta y cristales traseros oscurecidos y un color exclusivo: Bi-tono Gris Ascari. Además, también está disponible en otras dos tonalidades: Bi-tono Blanco Perlado y Bi-tono Rojo Emoción.

En el interior, está equipado con unos asientos deportivos específicos con refuerzos laterales y tapicería mixta que sujetan el cuerpo muy bien. El cuadro de instrumentos, el volante y la palanca de cambio cuentan con costuras en negro y rojo. El logo GR Sport está presente en el portón del maletero, las molduras de los pasos de puertas y las alfombrillas, de diseño exclusivo. El espacio interior está en la media del segmento de los compactos. No va sobrado de centímetros, sobre todo a lo ancho en la segunda fila, que solo ofrece 136 cm entre hombros, pero cumple. El maletero, por su parte, ofrece 313 litros, que no da para mucho equipaje, aunque suficiente para el día a día.

Al volante del Corolla GR Sport

Una de las grandes novedades a nivel equipamiento es que podrá llevar opcionalmente (1.200 euros) la suspensión adaptativa Adaptive Variable Suspension (AVS), que varía la respuesta y la dureza de los amortiguadores casi de forma instantánea en función del estado de la carretera y las acciones del conductor. Esto le permite ofrecer un comportamiento mejorado en todo tipo de firmes y controlar los movimientos de la carrocería, con una respuesta más precisa de la dirección, mayor estabilidad y, por lo tanto, cotas más altas de seguridad que los otros acabados sin este tipo de suspensión inteligente.

Filtra bien las imperfecciones del asfalto y se apoya en una dirección de tacto suave que te facilita la vida incluso en zonas reviradas, donde su comportamiento se ha mejorado, como te acabo de decir. 

Lo que no ha mejorado es el cambio automático de tipo variador continuo. Es demasiado protagonista, y no para bien, porque al pisar a fondo esperas el empuje del motor de combustión ayudado por el eléctrico y la realidad es que acelera, sí (sobre todo en los modos Sport S y S+), pero el ruido eclipsa sus buenas maneras. 

Y eso que en esta prueba me he movido mayoritariamente por ciudad, que es el terreno que más se adapta a las aptitudes de un híbrido. A lo largo de una semana he circulado sin contaminar el 25% de los kilómetros recorridos, una referencia para que tengas en cuenta que te será rentable si te mueves en ciudad en tu día a día, porque si sales a carretera es el propulsor térmico el que manda y el consumo será como el de un gasolina de potencia equivalente, es decir, unos 8,0 l/100 km. Al final, el consumo fue de 6,4 l/100 km. No está mal, pero para ser un híbrido...

Mi Opinión

Su comportamiento general y su consumo final ha resultado estar más cerca de un deportivo que de un híbrido. Pero si circulas mayormente por ciudad, puedes revertir esta situación. Las levas del volante afinan el engorroso funcionamiento del cambio CVT.