He probado el Renault Captur 2020, cuatro razones para comprarlo y una para pensarlo

Estuve en su presentación estática y he de confesarte que por fuera me pareció un cambio muy ligero. Cierto que estrena unos grupos ópticos mucho más atractivos y agresivos, que la parrilla frontal está presidida por el gran logo Renault de los nuevos modelos y la anchura del coche se estira hasta los 1,8 metros. Eso provoca un efecto de estar ante un coche mucho más robusto, una sensación que ha conseguido más el nuevo Peugeot 2008, uno de sus grandes rivales.

¿Hasta dónde ha cambiado el Captur?

Como me parecía un cambio bastante ligero, los responsables de Renault me aseguraron que cuando lo probara me daría cuenta de que los grandes cambios estaban a nivel mecánico y de tecnología. Y con esas palabras en la mente comienzo una prueba de la que voy a extraer cuatro razones para comprarlo y otra para pensarlo.

1. Calidad y acabados

Es lo primero que llama la atención, porque la mejora en calidad salta a la vista nada más abrir la puerta del nuevo Captur. No solo por la enorme pantalla central táctil de 9 pulgadas tipo tablet que preside la consola central (la misma que podríamos ver en un Renault Espace, un modelo de gama alta), sino también por el tacto de un volante de aro más grueso o del material que recubre el salpicadero. El cuadro de relojes es sencillo, completamente digital, y la lectura es muy fácil. Otra ventaja y mejora del interior es el aumento de huecos por todo el interior, en total ha ganado hasta 27 litros. Y su maletero ahora supera los 500 litros, gracias en buena parte a un doble fondo.

2. Motor

La nueva gama de motores que monta el Captur 2020 puesta claramente por los gasolina… y por el híbrido. Sí, porque este será el primer Catur que monte una variante híbrida, aunque todavía no se vende. Por eso, mientras llega, para mí la variante más interesante de comprar es el 1.3 TCE de esta prueba, un bloque gasolina de baja cilindrada (pero apoyado en un turbo), que entrega 130 caballos de potencia a través de un cambio manual de seis velocidades. Un buen propulsor, suave tanto por la forma de entregar la potencia como por los bajos niveles de rumorosidad o vibraciones que llegan al interior. Mueve con soltura los 1.184 kilos que declara en báscula. Los recorridos de la palanca de cambios son algo largos, y la elasticidad en sexta podría mejorar. Eso sñí, a cambio se marca consumos de 6 litros a velocidad de crucero sin muchos problemas. Y con el coche cargado.

3. Dinámica

Sin lugar a dudas es el apartado donde más mejora el nuevo Captur. Aunque por fuera luzca muy parecido al anterior, es un coche completamente nuevo, que estrena plataforma. Y eso se traduce en un chasis de nueva generación que negocia los virajes con mayor eficacia, mientras la dirección transmite una sensación de mayor control. Se han reducido las inercias, los balanceos que acusaba el primer Captur se contienen y el confort de marcha no se resiente. Partimos de la base de que es un coche eminentemente confortable (por ejemplo un Ford Puma es mucho más deportivo), pero este Renault disfruta de un equilibrio entre eficacia y comodidad muy destacables.

4. Tecnología 

En el año 2020 hay que apostar por la máxima conectividad y tecnología a bordo y Renault lo sabe. Por eso, entre otras medidas, el nuevo Captur cuenta con el sistema Renault Easy Link, con conectividad permanente 4G, navegación en tiempo real conectada a Tom Tom y nuevas funciones como la búsqueda de direcciones de Google. Dentro de su equipamiento puede montar un sistema de sonido Bose con nueve altavoces.

5. Plazas traseras y precio

Aunque ha ganado cuatro centímetros de batalla (en total son 11 cms más de longitud), las plazas traseras del Captur me siguen pareciendo algo estrechas, sobre todo si quieres viajar con tres adultos en ellas. Y, como es normal, el precio ha crecido en consonancia con el mayor equipamiento, tecnología y conectividad. Comparado con sus rivales, los 24.000 euros que cuesta se mueven en la línea de un Peugeot 2008, pero superan los 21.000 desde los que tienes un Nissan Juke y un Opel Crossland X de potencia similar.