Prueba Ford Puma 2020 ¡Ya lo hemos conducido!

Después de 17 años de descanso, el nuevo Ford Puma estará en los concesionarios en escasas semanas. Pero el pequeño gran felino no tiene nada que ver con su antecesor. Nosotros nos hemos adelantado y nos hemos puesto al volante para contártelo. Esta es la primera prueba del nuevo Ford Puma 2020.

El nuevo Ford ingresa al segmento en auge de los SUV compactos con 4,19 metros de largo, 1,54 de ancho y 1,93 de alto. Dependiendo de la perspectiva desde la que lo mires, el frontal con sus faros elevados recuerda al coupé de los 90, aunque también al Ford GT, puesto que sus grupos ópticos han servido de inspiración. 

Gracias a la distancia entre ejes, que es casi diez centímetros más largo que el Ford Fiesta, el Puma tiene más espacio en su interior. No es exuberantemente desahogado en la parte trasera, pero sí más que correcto. Seis dedos son los que separan mis rodillas de tocar los asientos delanteros, hecho destacable, y tres los que impiden que mi cabeza roce con el techo (mido 1,78 m). La 'culpa' la tiene su techo en pendiente, que, por otro lado, le da más atractivo al coche.

Los pasajeros tienen espacio más que suficente para el equipaje: Ford especifica de 456 -de lo mejor del segmento- a 1.161 litros de maletero, que es fácil de cargar gracias al gran portón trasero. Maletas y más maletas, porque la cantidad de equipaje que puede acoger es sorprendente. Y un hueco de 80 litros debajo del espacio de carga que se ha denominado 'MegaBox' extiende aún más la capacidad. Gracias a una abertura de drenaje en el piso, el compartimento de equipaje adicional se puede limpiar fácilmente con agua; muy útil cuando se han transportado objetos sucios...

Un interior a la altura de los tiempos

En el cockpit, el puma se ve muy sólido. La instrumentación opcional con pantalla de 12,3 pulgadas frente al conductor está totalmente digitalizada, y casi todo es configurable. En el centro del cockpit, un monitor para sistema de audio y navegación se ubica a una altura claramente legible. Los asientos delanteros tienen una función de masaje para las vértebras lumbares de serie con el acabado Titanium. Lástima que las fundas que se pueden quitar y limpiar fácilmente gracias a su cremallera no llegue a España...

En el lanzamiento al mercado, el Puma viene con dos motores de gasolina de tres cilindros y un litro con cuatro variantes. El modelo básico tiene una potencia de 125 CV. Éste puede ser hibridado con un sistema de 48 voltios, por lo que en su equipamiento de serie entra la etiqueta ECO de la DGT. La otra opción es la de 155 CV, también disponible en versión mild-hybrid por solo 350 euros. En todos ellos, la potencia se transmite mediante una caja de cambios manual de seis velocidades. El generador de arranque accionado por correa, que entrega 16 CV cuando es necesario, no solo reemplaza el alternador convencional, también sirve como un refuerzo: aporta hasta un 50 Nm de par durante la conducción. Pero la conducción puramente eléctrica no es posible.

Más eficiente

Ni el sistema híbrido ni la restricción a tres cilindros hacen del Puma un milagro para ahorrar gasolina. Oficialmente, Ford especifica de 5,5 a 5,8 l / 100 km (WTLP), aunque en realidad esto es casi imposible. Durante la prueba del Ford Puma 2020 con el motor 1.0 EcoBoost de 155 CV MildHybrid hemos obtenido una media de 7,7 l/100 km. He de decir que gran parte del recorrido fue por un puerto de montaña en subida.

Su motor rezuma potencia gracias a los caballos que genera, pero también a la asistencia del sistema eléctrico. Tiene bajos, lo que ayuda a no estar jugando con el cambio -aunque eso no supone un problema por lo rápido, preciso y buen tacto que tiene su transmisión-, pero según sube de revoluciones, el punch es mayor, siempre entregado de forma progresiva, nada de violentas patadas. También he tenido la oportunidad de probar el 1.0 EcoBoost de 125 CV MildHybrid, que creo que es la opción más lógica porque rinde una potencia más que suficiente.

El chasis es otro punto culminante del Puma: casi no hay balanceos, toma curvas precisas, y es excelente en línea recta. La suspensión es bastante cómoda y adecuada para largas distancias -para viajer largos también es una buena opción por su conseguida insonorización-. Se pueden seleccionar cinco configuraciones: 'Normal', 'Eco', 'Sport', 'Resbaladizo' y 'Pista'. La elección cambia, entre otras cosas, la coordinación del control de tracción y el ESC, pero lo que más aprecio es la entrega de potencia cuando paso del modo normal al más deportivo. En el futuro, con la caja automática, también varía el momento de inserción de las marchas.

Precios y equipamiento del Ford Puma 2020

El Ford Puma 2020 esta a la venta con los acabados: Titanium, ST-Line y ST-Line X. El de acceso tiene un precio de partida de 21.925 euros. Como no podía ser de otra forma tratándose del segmento que es, el todocamino americano equipa la última tecnología en seguridad y conectividad como el control de crucero adaptativo con parada y arranque automático, reconocimiento de señales con limitación de velocidad y centrado en carril, información local de peligros, asistencia de maniobra evasiva, alerta de dirección contraria, modem incorporado FordPass Connect convierte el coche en un punto WIFI con conectividad para hasta 10 dispositivos;  cámara 180º y SYNC 3, compatible con Apple CarPlay y Android Auto.

Conclusión tras la prueba del Ford Puma 2020

Hay mucho, muchos SUV, pero creo que Ford ha creado un producto que tiene cabida en el mercado. Es atractivo, tiene un interior bien hecho, su maletero es enorme y sus dos motores, que pueden tener hibridación ligera -por lo tanto, etiqueta ECO-, enchufan de maravilla.