Prueba DS 3 Crossback E-Tense

La ofensiva de las marcas por conquistar la parcela del coche eléctrico sigue in crescendo. La firma premium de PSA ha hecho los deberes, como pone de manifiesto el coche de la prueba, el DS 3 Crossback E-Tense. Ahora, el todocamino compacto, además de presumir de diseño rompedor, puede hacerlo de moverse de una forma más limpia.

Por fuera existen pocos cambios respecto al modelo con motor de combustión. Mantiene los tiradores escamoteables exteriores, algo que a mí, independientemente de si es un Porsche o un Land Rover, es un recurso que no termina de convencerme; pero adopta novedades como los DS Wings Satin Chrome, la parrilla en Gris Anthracite con el logo E-Tense, el paragolpes de la zaga, que es de nueva factura y las llantas de aleación Kyoto de 18 pulgadas. Lo que tampoco encontrarás en ninguna otra variante del DS 3 Crossback es el color Cristal Pearl.

El interior, como ocurre con el exterior, mantiene el diseño. Por ello es imposible que a tu ojo se le escapen las múltiples formas geométricas que inundan el habitáculo. Tampoco el cuero que se encarga de tapizar casi todos los elementos, como acabado Grand Chic que es, por lo que da muy buena impresión, tanto a la vista como al tacto. Eso sí, sigue equipando plásticos duros como los de los extremos inferiores de la consola central, algo que no casa con el precio del vehículo. Como no podía ser de otra forma tratándose de un coche eléctrico, la pantalla del sistema de infoentretenimiento, que es de 12 pulgadas, y el cuadro de instrumentos brindan información del sistema de propulsión: estado de la batería, uso de la energía…

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Continúo la prueba del DS 3 Crossback E-Tense y me acomodo en las plazas traseras. Según la compañía francesa, el espacio disponible es el mismo: con mis posaderas en la banqueta te lo confirmo. "¿Cómo lo habéis conseguido?", pregunto al ingeniero de turno, que me espera fuera del automóvil. "Instalando la batería en el piso", me responde con mucha tranquilidad, como si alojarla en ese lugar no conllevase ninguna dificultad... Y es que por esa solución, los pasajeros de la segunda fila tienen un amplio espacio para las rodillas, aunque no para la cabeza, puesto que con mi 1,78 m, son solo dos dedos los que separan mi testa de rozar con el techo -lo mismo que en las variantes diésel y de gasolina-. Además, con la aleta de tiburón, un buen recurso en lo que a diseño se refiere, la sensación de amplitud decrece, así como la visibilidad. También el maletero permanece inalterado, por lo que cubica 350 litros.

Cuando pulso el botón de encendido, el silencio es el único protagonista -ventajas del coche eléctrico-, invitándote a realizar una conducción sosegada... hasta que la energía de su motor de 136 CV y su par motor de 260 Nm comienzan a aflorar. No noto un punch contundente en los modos ‘Eco’ y ‘Normal'; sí más acusado en el 'Sport', aunque sin muchos alardes -influye su peso de 1.600 kilogramos- y con un gasto mayor de electricidad. En movimiento consigue regenerar energía, sobre todo al frenar, acción que puede verse incrementada con la funcionalidad ‘Brake’, con la que la cual la recuperación es mayor debido a su 1,3 m/s2 de deceleración. Durante el test he obtenido una media de consumo de 19,6 kWh, una suma alejada de los 17,6 kWh oficiales.

Durante la prueba del DS 3 Crossback E-Tense he descubierto un coche que pisa bien, que tiene buenas maneras, y más ahora con el centro de gravedad más bajo. Asimismo, me ha llamado la atención la buena insonorización que tiene gracias al tratamiento que se ha llevado a cabo en él: ahora equipa parabrisas acústico y unas ventanillas y unas láminas para las puertas más gruesas. ¿Recuerdas ese sonido que suelen emitir los coches eléctricos circulando a menos de 30 km/h? ¿No? Entonces no esperes a montarte en esta versión ecológica del DS 3 Crossback porque desde su interior no podrás percibirlo.

Su batería de ión-litio es de 50 kWh permite circular hasta 320 km con una sola carga, una autonomía menor que la que ofrece la competencia. Según DS, puede cargarse al 80% en solo 30 minutos con un sistema de 100 kW. Esa cifra aumenta a cinco horas si es cargado en uno trifásico y a ocho si se hace lo propio en un enchufe convencional. 

El precio de partida del coche de la prueba, el DS 3 Crossback E-Tense, con el acabado de acceso, el So Chic, es de 38.300 euros e incluye: sistema de ayuda al aparcamiento trasero, arranque en pendiente, climatización automática y alerta activa de cambio involuntario de carril. En los otros dos disponibles, el Performance Line y Grand Chic, la suma asciende a 39.100 y 43.200 euros, respectivamente. A todos estos precios solo se les ha aplicado el descuento de lanzamiento, que es de 1.000 euros, por lo que el precio final puede ser más ajustado.

Ya que hemos llegado hasta aquí, ¿quieres saber cuál es tu coche ideal?