¿Movimientos en Volkswagen? ¿Es cierto que cierran la fábrica de Dresde y pasan el ID.3 a China?

Cuando apareció el Volkswagen ID.3, se anunciaba a bombo y platillo que iba a suponer toda una revolución. De hecho, se basaba en la entonces (hablamos de 2019) nueva plataforma modular MEB en la que el grupo había invertido 66.000 millones de dólares.

Lo cierto es que el ID.3 no es precisamente un superventas: en España, el año pasado (un año raro, todo hay que decirlo), cerró con 408 unidades frente a las 769 de su hermano mayor el ID.4 o las 2.667 del Tesla Model 3 (referencia obligada). En 2023, el acumulado anual ya supera los 500.

Sin embargo, no todo es tan negro: a nivel europeo, el ID.3 matriculó 76.600 ejemplares, mientras que el ID.4 tuvo unas ventas de 193.200 unidades el año pasado. 

Además, a nivel global, los eléctricos de VW aumentaron un 13,4% hasta las 350.000 y han alcanzado una cuota del 12,6% (10,5%, en 2021), lo que les aúpa a la posición de líder del mercado en este segmento en Europa. 

Rumores de que cierran la fábrica de Dresde y se llevan a China el ID.3

Quizá por ello, si te has topado con la noticia de que Volkswagen cierra la fábrica de Dresde y que se lleva la producción del eléctrico a China (donde ya se produce en colaboración con JAC), te hayas sorprendido. ¿Pero qué hay de cierto?

Esta ciudad está a apenas 40 minutos en coche, en lo que fue la antigua RDA, y la planta se inauguró en 2002 con el Volkswagen Phaeton. 

Aunque nunca ha tenido un espíritu de producir enormes cantidades de vehículos, sí que se ha convertido en una especie de punta de lanza en cuanto a electrificación y tecnología, debido a su alto grado de automatización.

De hecho, uno de los puntos más llamativos de este complejo de 83.000 metros cuadrados es que tiene paredes de cristal, de ahí su sobrenombre de "Glaeserne Manufaktur" (fábrica de cristal o transparente), a través de los cuales se puede ver toda la coreografía robótica necesaria para la fabricación de sus modelos.

Nosotros hemos querido saber la opinión de Volkswagen al respecto en un día importante para la marca, pues se ha desvelado el nuevo Volkswagen Tiguan 2024.

Nos aseguran que todo eso es infundado, "no hay nada", me dicen al teléfono desde la propia marca. Una fuente ajena a Volkswagen pero conocedora del tema, me ha espetado claramente un "eso es mentira". 

De manera más política y comedida, desde los cuarteles de la marca en Wolfsburgo han publicado una respuesta oficial en la que sí admite conversaciones con los representantes de los trabajadores (800 a plena capacidad, 300 en la actualidad) con el objetivo de "impulsar aún más la competitividad global y responder a la volátil situación del mercado". 

Esto significa que quizá sí que existan planes para mover (no necesariamente cancelar) la producción del ID.3, sobre todo desde que se hiciera público que el CEO del Grupo Volkswagen, Oliver Blume, entraba en la marca con el objetivo de racionalizar el gasto y poner algo de orden.

En todo caso, el ID.3 no solo se fabrica en Dresde, de donde el año pasado salieron 16.500, unos 18 al día: tiene fábricas en Zwickau (la principal ubicación, dedicada únicamente a eléctricos, que acaba de anunciar que no renovará 249 contratos temporales por la caída de la demanda) y, desde este otoño, en Wolfsburgo.

Otra de las voces que han tenido algo que decir ha sido Martin Dulig, que es el Ministro de Economía de Sajonia, el estado del que es capital dicha ciudad: 

"Volkswagen en Dresde me confirmó hoy por teléfono que no hay ningún cambio en la orden de la junta directiva de cambiar las áreas comerciales" en la ciudad, dijo el lunes a la Deutsche Presse-Agentur (DPA), la mayor agencia de noticias alemana. 

En todo caso, Volkswagen no quiere profundizar en el asunto: "A la luz de la reciente cobertura mediática, confiamos en que comprenderán que no deseamos ofrecer ninguna base para la especulación".