El protagonista de este vídeo ha tenido tanta suerte como el motorista que se cayó y aterrizó encima de la moto del rival. Es de ese tipo de cosas que si no lo ves por ti mismo no te lo crees. Tras realizar una buena salida (mejor que la de su contrincante), este piloto perdió el control de su Chevrolet de 1955 y sufrió un brutal accidente durante la carrera de aceleración.
Tras dar varias vueltas de campana, el vehículo por fin se detiene. Es en ese momento cuando los presentes se percatan de que la mitad del cuerpo del piloto había salido por el parabrisas. Al parecer, el coche no contaba con un cinturón de seguridad apropiado, lo que provocó que el conductor saliera despedido (aprende a colocarte correctamente el cinturón de seguridad).
Esta escena tuvo lugar durante la celebración de la competición Colorado Street Outlaw en el circuito de Pikes Peak International Raceway, en Colorado (Estados Unidos). Por sorprendente que pueda parecer, el piloto que sufrió el accidente no resultó herido y fue capaz de salir del vehículo sin necesitar ayuda externa.
Fuente: WCF