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Un trasplante para el Lamborghini Huracan: ahora es una bestia con un V8 y doble turbo

Un trasplante para el Lamborghini Huracan: ahora es una bestia con un V8 y doble turbo

Una de las características que hace del Lamborghini Huracan un modelo tan deseable es su motor V10 atmosférico. Sin embargo, este superdeportivo italiano es… algo diferente. Ha sido sometido a un trasplante de corazón para sustituirlo por uno de General Motors hecho a medida y modificado para la ocasión. Y es que este Lamborghini Huracan es una bestia con un V8 y doble turbo.

Chris Steinbacher, del canal de Youtube B is for Build, rescató este Lamborghini Huracán LP 610-4 de 2015: cuando se hizo con él estaba prácticamente calcinado porque había sido pasto de las llamas. Cuatro meses después de aquella compra lo presentó en el Sema Show de Las Vegas: no sólo lo había reconstruido con paneles de carrocería heredados de un Huracán Super Trofeo, su interior era diferente.

Una diferencia de más de 800 caballos

Cabe recordar que el modelo tradicional cuenta con un propulsor V10 de 5.2 litros que desarrolla una potencia de 610 CV y va unido a una caja de cambios de doble embrague y siete relaciones denominada 'Lamborghini Doppia Frizione' (LDF) que dirige toda su fuerza a las cuatro ruedas.

Un trasplante para el Lamborghini Huracan: ahora es una bestia con un V8 y doble turbo

Con el objetivo de que produjera más del doble de su potencia original, reemplazaron el V10 del Lamborghini Huracan por un V8 de GM al que sumaron un par de turbocompresores. O lo que es lo mismo: un bloque de ocho cilindros y 7.0 litros que recibe la ayuda de esos dos turbos de grandes dimensiones para obtener una potencia de 1.500 caballos. Y por si todo esto fuera poco, la guinda del pastel la pone una caja de cambios manual procedente de un Audi R8 que transmite toda la potencia al tren trasero.

La prueba

Tras la reconstrucción y la posterior presentación de este particular Huracan, era hora de ponerlo a prueba y divertirse. Para ello se dirigieron a la pista de un aeropuerto equipada para la ocasión: los inicios no fueron sencillos ya que la aceleración del Lamborghini no era la que se espera de un V8 con dos turbocompresores. No obstante, superados los problemas de abastecimiento, el superdeportivo italiano dio la talla en todas las pruebas a las que fue sometido: cronometraje, carreras con arranque en parado…

Etiquetas: Superdeportivos

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