El Toyota Corolla es el coche más vendido de la historia, que se dice pronto, gracias a sus más de 50 millones de unidades comercializadas en todo el mundo desde su lanzamiento en octubre de 1966. Por ese motivo, la firma japonesa tiene que cuidar su modelo estrella, aunque, obviamente, siempre poniendo atención en los tan demandados todocamino. 

Y en esta duodécima generación, el éxito no ha decaído; tampoco en España. Para que te hagas una idea, en 2022 fue el compacto más vendido del país. Por ello, la compañía nipona ha seguido la máxima de "si algo funciona, mejor no tocarlo" o, por lo menos, no en exceso... La carrocería recibe leves cambios como en la trama de la parrilla, las molduras de los faros antiniebla o la firma lumínica. 

Además, estrena llantas y colores para la carrocería. Y podrás preguntarte: ¿eso es todo? Sí, pero es que no necesita más; y menos aún con el acabado GR Sport, que, por la deportividad que otorga a su imagen, es de baba en la comisura de los labios.

Empecemos por el interior...

En el interior destaca el cuadro de instrumentos digital con una pantalla de alta definición de 12,3” y la del sistema multimedia de 10,5" -en el anterior era de 8"- con un funcionamiento mucho más rápido y mayor resolución. Es algo que pedía a gritos. También trae gráficos nuevos, pero que comparados con los de la competencia, creo que se sitúan un peldaño por debajo. Lo que sí me gusta es su sistema antideslumbramiento. Y piensa que me conformo con poco, pero que tenga botones físicos para todas las funciones del climatizador lo veo un buen punto. 

El salpicadero está tapizado en polipiel y porta pespuntes en plata. Este toque aumenta la calidad percibida. Pero también al tacto es muy bueno, gracias a los plásticos gomosos en su parte superior y media. Por su parte, los de los paneles de las puertas son duros, pero de buena apariencia. Además, los acolchados tienen pespuntes en rojo. 

Los mismos que el volante, que está forrado en cuero liso y perforado en los extremos. Pero lo mejor de todo, sin duda, son los asientos semibacquet tapizados en cuero perforado, y que cumplen, porque son cómodos y agarran bien el cuerpo.

Respecto a las plazas traseras, el espacio disponible es holgado, no como en el caso de la versión hatchback, que cuenta con seis centímetros menos de espacio para las rodillas. Más justo es el reservado a la cabeza: con mi 1,78 m, son tres dedos los que la separan de rozar con el techo. 

Y en lo que respecta al maletero, el del familiar cubica 581 litros, que está bastante bien, pero que es un volumen inferior al del Skoda Octavia (610 litros), Ford Focus (608 litros) y VW Golf (605 litros). 

Con 196 CV

La motorización 2.0 ahora rinde 196 CV, 16 más. La magia se ha conseguido al instalar un motor eléctrico de mayor potencia y una batería de iones de litio -la anterior era de níquel e hidruro metálico- con mayor capacidad. Tiene un buen empuje y respecto a la cuarta generación del sistema de impulsión de Toyota, es más silencioso. Es cierto que cuando se demanda más energía, el sonido es evidente, pero el que llega al habitáculo es menor que en el de 2019.

Tiene diferentes perfiles de conducción: Custom, Sport S +, Sport S, Normal, Confort y ECO, a los que se suma el EV, con el que puede circular en eléctrico si la batería y las condiciones lo permiten.

En marcha, en cualquiera de los tres últimos perfiles, ofrece un comportamiento tranquilo, y es fácil lograr un consumo medio de 5,2 l/100 km; en los otros es más vivo. Y como equipa la suspensión adaptativa AVS, su respuesta puede cambiar al gusto del conductor, pero siempre manteniendo la vitola de vehículo cómodo.

El Toyota Corolla Touring Sports 200H GR Sport tiene un precio de 37.300 euros (puedes restarle 4.300 de descuento promocional) e incluye un equipamiento de serie muy completo: llantas de aleación de 18", climatizador bizona, cargador inalámbrico de smartphone, asientos delanteros deportivos y calefactables y varios sistemas de seguridad como el cambio involuntario de carril, el aviso de frenada emergencia o la alerta por pérdida de atención, entre otros.