Otro pobre Lamborghini Aventador víctima de su dueño
De sobra es conocido que el dinero no da el buen gusto, y parece que las buenas manos al volante tampoco. Cada cierto tiempo, con una cadencia que podríamos tildar de preocupante, salta la noticia de que un superdeportivo de lujo se ha empotrado en esta o aquella ciudad, ya sea contra un coche, contra un muro o, como es este caso, contra una zanja. Ha ocurrido en Malasia y, después de ello, este Lamborghini Aventador tardará tiempo en volver a ser el mismo.
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El exótico italiano, decorado con una llamativa combinación de negro y naranja mate en su carrocería, circulaba por lo que parece una carretera con dos carriles. Cerca de una intersección intentó adelantar al vehículo que el precedía pero en el proceso, pro razones que se desconocen, rozó contra este, perdiendo el control e impactando contra un tercer coche para acabar lanzado contra la zanja de un riachuelo en la que, por suerte, no cayó.
A pesar de salvarse de la puntilla, lo cierto es que el Aventador presenta daños bastante graves: el paragolpes delantero está totalmente destrozado, el capó está desencajado, en el lateral derecho faldón y retrovisor también están perjudicados, y las ruedas también están reventadas. Esto último es lo más preocupante ya que, al menos delante, queda bastante claro que se ha partido el eje, y no vamos desencaminados si pensamos que a la suspensión también le hará falta un repasito.
Con un poco de suerte, dado que la zaga está prácticamente intacta, el motor V12 atmosférico de 700 CV no habrá sufrido daños. A pesar de ello cuesta imaginarse a cuánto ascenderá la cifra de la factura de la reparación, que a buen seguro no será barata. El lado positivo es que, incluso con todo lo ocurrido, no ha habido que lamentar muertos ni heridos de gravedad.
Fuente: Carscoops.
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