Mercedes-AMG GT R vs Porsche 911 GT3 RS, duelo en Nürburgring

VÍDEO: Los 5 peores rivales del Porsche 911 GT3 RS

Cada vez que hablamos de algo que tenga que ver con el circuito de Nürburgring repetimos lo mismo, y no vamos a dejar de hacerlo. Si te gustan los coches, es una visita obligada alguna vez en la vida. Lo ideal sería que rodases en la pista para conocer de primera mano el reto que supone, pero si no te atreves o, simplemente, no te apetece, con sólo contemplar lo que allí se cuece te irás satisfecho. Seguro que logras ver coches de la altura del Mercedes-AMG GT R y del Porsche 911 GT3 RS, precisamente los dos protagonistas que han provocado este artículo.

No te pierdas: Todas las novedades que veremos en 2019

Los dos superdeportivos alemanes son dos de los modelos más rápidos que jamás hayan pisado la pista alemana. En 2016, el Mercedes fue capaz de completar los poco más de 20 kilómetros que tiene la vuelta en un tiempo de 7:10,9. Sobre el papel el Porsche es más rápido, ya que fue capaz en su momento de rebajar ese crono incluso por debajo de los siete minutos. Marcó un impresionante 6:56,4.

El duelo entre ambos vehículos es colosal, y comienza incluso desde el momento previo a entrar en la pista. Con dos pilotos a la altura del desafío que tiene por delante, el que está al volante del Porsche 911 GT3 RS se pasa unos cuántos minutos por detrás del que pilota el Mercedes-AMG GT R. Al final logra adelantar e imponer su ritmo. No obstante, el verdadero mérito del piloto del Mercedes se ve cuando el de Porsche adelanta al resto de los coches con los que se cruza. ¡Parece que van parados!

No te pierdas: Probamos el Porsche 911 992

Recordemos que el 911 GT3 RS equipa un motor de 4.0 litros y seis cilindros capaz de desarrollar una potencia de 520 caballos y un par máximo de 470 Nm, mientras que el AMG GT R, con un V8 de 4.0 litros turboalimentado, se va hata los 585 caballos y 700 Nm. Con estas cifras se entiende la distancia que saca el modelo de la estrella a su rival en las rectas, y también se demuestra que, en un circuito, lo realmente importante es pasar rápido por las curvas.

Ya que hemos llegado hasta aquí, ¿quieres saber cuál es tu coche ideal?