La increíble historia del Lancia Delta HF Integrale

Remontándonos a los últimos años de gloria de Lancia, nos encontramos con uno de los coches más exitosos y reconocidos de la compañía italiana, el Lancia Delta de primera generación. El coche estuvo en activo entre 1980 y 1991, y se ofrecía en diferentes versiones y motorizaciones. Sin embargo, la más famosa de todas lleva el apellido HF Integrale y, si bien es cierto que se lanzaron hasta ocho variantes diferentes de esta versión, es el más reconocible de la gama. Esta es la increíble historia del Lancia Delta HF Integrale.

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Basado originalmente en el chasis del Fiat Ritmo, Lancia introdujo el Delta en el mercado en el año 1980 como el reemplazo generacional del Lancia Fulvia, un exitoso modelo con carrocería sedán y coupé que se convirtió en el primer modelo de la compañía italiana en ganar un campeonato del mundo de rallies. A medio camino encontramos la victoria del Lancia 037, por lo que el fabricante se enfrentaba al difícil desafío de lanzar un modelo que igualara e incluso superara en éxitos a sus dos predecesores.

La increíble historia del Lancia Delta HF Integrale

De este modo, Lancia presenta el Delta en 1980 y se atreve con los rallies una vez es prohibido el famoso Grupo B en 1986. El Grupo A pasaba a sustituirlo en el Campeonato y en 1987 llega Delta HF Integrale como el modelo de competición de la marca. Pero, para homologar este modelo de carreras es importante lanzar una serie de unidades de calle, y es aquí donde nace el HF Integrale legal para su uso en carretera.

Pero el primer Delta HF ya se había presentado en 1983 como una versión turbo de 130 CV que estuvo en activo hasta 1986. Ese mismo año se presentaría una variante más potente, con 140 CV, y una versión de tracción total con 165 CV. Sin embargo, el plato fuerte llegaría en la versión de homologación del coche de rallies del Grupo B, el Delta HF Integrale 8V de 1987. 

Esta versión tomaba como base un motor turbo de 2.0 litros con 185 CV de potencia, equipado con diferenciales Torsen y Ferguson para el sistema de tracción integral, y se equipó con un kit de carrocería más ancho y unas llantas más grandes. Esta versión estuvo en activo hasta 1989, año en el que deciden lanzar una versión mejorada de este modelo para dar respuesta a la presión de Toyota en el campeonato de rallies.

Nace entonces el Lancia Delta HF Integrale 16V, una versión que era, en gran medida, idéntica, pero los ingenieros de la compañía desarrollaron una culata nueva de 16 válvulas que permitía elevar la potencia hasta los 200 CV. A su vez, se le dotó de un capó abultado para dar cabida a la nueva culata, un mayor reparto de par al eje trasero y unas nuevas llantas. El nuevo turbo, una unidad Garret T3, permitió aumentar la agresividad del vehículo y hacerlo más competitivo.

Llegan las versiones Evoluzione

Ya en 1991, un año antes de que se retirara oficialmente el Delta HF Integrale 16V de la competición, Lancia presenta el primer HF Integrale Evoluzione, una versión evolucionada del modelo que introducía nuevos frenos y suspensión delantera, una mayor anchura de vías y una mecánica que permitía al conductor de la versión de calle disfrutar de hasta 210 CV de potencia.

Las cosas no quedaron así ya que dos años más tarde, en 1993, se presenta una nueva evolución del modelo, el HF Integrale Evoluzione 2. Esta última versión estaba basada en el mismo propulsor que el Evoluzione, pero se equipó un catalizador, un turbo más pequeño y se equiparon diferentes elementos electrónicos más modernos. Como resultado, el coche ahora entregaba 215 CV de potencia, había mejorado en acabados interiores y se le habían instalado unas llantas de mayor tamaño.

El Lancia Delta HF Integrale se convirtió en el modelo más exitoso en competición de la compañía, logrando conquistar hasta en seis temporadas consecutivas (1987-1992) el Campeonato de Constructores del Mundial De Rally, un hito que, a día de hoy, sigue siendo un récord. Subaru conseguiría tres Campeonatos de Constructores con el Impreza entre 1995 y 1997, Peugeot lo replicó entre 2000 y 2002 con el 206 WRC, Citroën lograría seis títulos (2007-2012) con los C4 WRC y DS3 WRC, y Volkswagen cuatro veces con el Polo R WRC entre 2013 y 2016.