Así se gestó el coche más impresionante de la historia de Porsche
Este fue el proceso de concepción y desarrollo del coche más impresionante de la historia de Porsche. La tradición se fundió con la innovación, dando lugar al Mission X, un prototipo de hiperdeportivo futurista para celebrar el 75º aniversario de la marca.
2023 es un año especial para la marca alemana, porque cumple su 75º aniversario. Por ello, para celebrar tal efeméride, ha creado el que, posiblemente, sea el coche más impresionante en la historia de Porsche. Un hiperdeportivo que debe marcar el camino de la firma para los próximos 75 años. No es otro que el Porsche Mission X.
Este espectacular hiperdeportivo eléctrico se presentó en un evento celebrado en el Museo Porsche de Stuttgart-Zuffenhausen, como parte de la celebración del 75º aniversario del fabricante.
Durante el acto, al que asistieron invitados como el piloto Mark Webber o el actor Patrick Dempsey, Michael Mauer, vicepresidente de Style Porsche, destacó, entre otras cosas, el innovador color Rocket Metallic, un marrón que, según el ángulo de visión, cambia de tono, haciéndose más oscuro.
Tiempo atrás, le preguntaron a Mauer por el desarrollo de un posible hiperdeportivo para el futuro y su respuesta fue: “Es un sueño y, a la vez, un ejercicio bastante estresante". Ahora es una realidad, al menos, en forma de prototipo.
Así se gestó el coche más impresionante de la historia de Porsche
La decisión de crear el Porsche Mission X, bajo el código interno XS23, se tomó a mediados de 2022. La cuestión inicial fue cuál debía ser el símbolo para los próximos 75 años de la marca y la respuesta inmediata fue que debía ser un hypercar que continuara la línea de sus antecesores: el 959, el Carrera GT y el 918 Spyder. Y totalmente eléctrico.
El requisito de Porsche era mantener las proporciones lo más compactas posible a pesar de la última tecnología de altas prestaciones. En primer lugar, se examinaron y reevaluaron los innumerables conceptos e ideas de los últimos cinco años.
"Para nosotros era importante dar al coche un mensaje visual claro: 'Soy algo más que un hypercar, mis genes están en la competición'", explica Mauer. Para ello, los diseñadores se inspiraron en grandes modelos de diferentes épocas, como el 919 Hybrid que ganó en Le Mans, entre 1014 y 1017 y los iconos de los años 70, como el legendario 917K.
Precisamente, la cúpula de vidrio ligero con exoesqueleto, las puertas tipo Le Mans con apertura vertical y la ventanilla al estilo Daytona recuerdan al Porsche 917. En cambio, los faros lucen una firma luminosa que evoca a los coches de carrocera como el 906 y el 908. De esta manera, se combina la tradición con la innovación para crear algo nuevo.
Pese a ser un hiperdeportivo sin concesiones, el interior no se ha diseñado siguiendo las líneas funcionales de un vehículo de competición. En lugar de Alcantara, se utilizó tela y cuero en colores a juego, para lo cual se coordinó una composición general armoniosa con los compañeros del departamento de Color y Tapicería.
Por ejemplo, está pintado deliberadamente en el apagado color marrón Rocket Metallic en lugar de en un tono llamativo. Se trata de colores que suelen utilizar las marcas de moda de lujo y que transmiten una discreta sobriedad.
Los ligeros elementos de carbono se tiñeron a juego con el color Rocket Metallic, de modo que solo son reconocibles si uno se fija bien: "El contraste entre las formas de competición y un equipamiento elegante y lujoso crea tensión", afirma Mauer.
En el diseño del Mission X, llaman poderosamente la atención las amplias superficies, causando una impresión casi escultural. Algo que caracteriza a Porsche es su cuidado por los detalles y esto se aprecia en las tiras luminosas, las tiras luminosas y el botón de arranque del interior, que parpadean junto con las luces delanteras cuando se carga la batería de 900 voltios.
¿Llegará a producción?
Para que el Porsche Mission X sea viable, en el proyecto han participado numerosos ingenieros, técnicos de competición, expertos en aerodinámica y especialistas de muchos otros campos.
"Con esto hemos abierto una ventana al mañana. Y nuestra forma de entender la sostenibilidad es que incluso nuestros estudios conceptuales tienen suficiente sustancia como para influir en el futuro de la marca", afirma Mauer.
Sin embargo, para llevarlo a producción, el vicepresidente de Style Porsche reconocer que “tendríamos que volver a afinar la aerodinámica. Para ser el coche homologado más rápido en Nürburgring-Nordschleife, hay que optimizar la carrocería”.
“La puesta a punto lleva cientos de horas en el túnel de viento. La parte delantera, incluidos los faros, es muy avanzada estéticamente. Incluso el interior sería factible con pocas modificaciones", añade.
Etiquetas: prototipos
Descubre más sobre Álvaro Escobar, autor/a de este artículo.
Conoce cómo trabajamos en Autobild España.