Michael Schumacher acaba de cumplir 44 años. 'El Kaiser' nació en la localidad alemana de Hürt-Hermülheim el día 3 de enero de 1969 y cuatro años después ya corría por el parque con el coche a pedales al que su padre le había puesto un motor de ciclomotor. 

Desde entonces, Michael Schumacher ha dedicado toda su vida al automovilismo hasta convertirse en el piloto con el mejor palmarés de la Historia de la F1. Este año, tras tres temporadas en el equipo Mercedes ha anunciado que se retira definitivamente de la Fórmula 1, una marcha que ha levantado casi tanto debate como lo hizo su vuelta. 

Schumacher se va de la F1 sin haber logrado ni una sola victoria y con el podio en el GP de Europa 2012 y la pole de Mónaco (que posteriormente tuvo que ceder a Mark Webber por la sanción que arrastraba desde Montmeló) como mejores resultados. Mucho se ha hablado y escrito sobre el papel que ha desempeñado el alemán en el equipo en el que ha vivido su segunda etapa en la F1. ¿Era demasiado mayor? ¿Había perdido facultades? ¿Era realmente peor piloto que los que le han derrotado o, simplemente, contaba con peores medios? Es difícil poder concretar estas cuestiones, aunque, al final, sobre el papel solo quedan los fríos datos y estos dicen que Schumacher ha aportado menos a Mercedes de lo que Nico Rosberg en cuanto a resultados se refiere.

Además, en estos tres años se le ha visto cometer errores hasta entonces poco habituales en él, algo que en alguna ocasión le ha llevado a perder los papeles dentro de la pista, aunque hay que precisar, que, en este sentido, nunca fue un 'santo' y sirva como ejemplo aquel GP de Europa de 1997 contra Villeneuve en Jerez.

En cualquier caso, Michael Schumacher, a sus 44 años, empieza una nueva etapa en su vida. Seguramente más cerca de su familia que nunca, una de sus grandes devociones, y, probablemente, siempre cerca de los circuitos. Porque en su primera retirada parecía que no era capaz de vivir fuera del box de Ferrari, y era un fijo en el muro de la Scuderia en muchas carreras.

También le dio por las motos, aunque una mala caída, con lesión de clavícula incluída, le hará tomárselo con más calma. Si bien es cierto que una de las primeras cosas que ha hecho tras bajarse de un F1 ha sido subirse en una Ducati para rodar un spot con uno de sus patrocinadores junto a otros pilotos como el propio Pol Espargaró.

Quizá la reestructuración en la jefatura del equipo Mercedes tras la jubilación de Norbert Haug le de nuevas opciones, o puede que haya terminado tan 'quemado' que no quiera volver a saber nada de las 'Flechas de Plata'. También se habla de que podría hacer como su hermano Ralf (o como su antiguo rival, Mika Häkkinen) y probar en el DTM. En realidad puede hacer lo que le plazca, incluso jugar al fútbol, como ha hecho en alguna ocasión en un equipo de tercera división de Suiza, donde vive actualmente.  

Lo único que ha confirmado 'El Kaiser' es que volverá a la Carrera de Campeones en 2013 junto a Sebastian Vettel para intentar ganar la prueba por séptimo año consecutivo, por aquello de redondear la cifra. Pero esto no será hasta el próximo mes de diciembre, mientras tanto, Michael solo se debe preocupar de soplar las velas. Felicidades.