La historia del odiado trofeo de Sonic que levantó Ayrton Senna en la F1

Pocos conocen la historia del día en el que el famoso erizo Sonic subió al primer escalón del podio en la F1. Lo hizo en forma de trofeo y de la mano del mismísimo Ayrton Senna, en una de las mejores carreras que el astro brasileño completó en su breve, pero exitosa trayectoria en la categoría reina. Este hecho no dejó indiferente a nadie, ¡hasta Sonic fue 'baneado' por McLaren!

No vamos a contarte la historia de Sonic The Hedgeog, para eso sería más adecuado que te dirigieras a nuestros compañeros de HobbyConsolas, pero antes de entrar en materia sí que es recomendable que sepas que este característico erizo de color azul es el protagonista de la franquicia de videojuegos homónima, propiedad de la compañía SEGA. 

Todavía hoy, algo más de 30 años después de su nacimiento como rival de Super Mario (Nintendo), Sonic es un auténtico icono. Más allá de los videojuegos, el erizo ha aparecido en cómics, series de dibujos animados, libros, películas, camisetas... dando grandes alegrías comerciales a sus creadores.

Senna y SEGA colaboraron para desarrollar Super Monaco GP II

La relación de Ayrton Senna y SEGA comenzó cuando dos empresas originarias de los dos países que más cariño tenían hacia Ayrton, Brasil (Tectoy) y Japón (SEGA), decidieron unirse para crear el simulador de conducción más realista visto hasta la fecha: Super Monaco GP II. 

Por aquel entonces, en 1992, Senna ya había ganado tres títulos mundiales, los tres con coches de McLaren propulsados por Honda, una relación que despeja cualquier duda sobre el cariño que existía en Japón hacia el brasileño. Para SEGA, contar con Senna como asesor e imagen en Super Monaco GP II era un auténtico bombazo que se tradujo en un considerable éxito de ventas.

Los jugadores podían contar con los consejos del propio Senna, encargado de realizar tutoriales para quienes se pusieran al volante, y se enfrentarían al brasileño en los circuitos del campeonato del mundo de F1. Eso sí, por problemas con la licencia, ni el resto de los pilotos ni los equipos eran representados con nombres reales. 

De Ayrton a 'Magic Senna': Las grandes gestas del mito de la F1

Cómo llegó Sonic al podio de F1 con Senna y el enfado en McLaren

Dado el éxito del videojuego y la buena sintonía que ya existía entre SEGA y algunos de los protagonistas de la F1, siendo incluso conocedores de la buena visibilidad que obtendrían en todo el mundo, la compañía japonesa decidió ir un paso más allá y patrocinar tanto a un equipo (Williams) como un Gran Premio (Europa) en 1993.

Curiosamente, a pesar de la relación previa entre Senna y SEGA, el equipo apoyado no fue donde corría el brasileño, que en estas fechas aún era McLaren, aunque con un notable bajón competitivo de la escudería. Una de las razones para ello podría ser que la formación de Woking había roto con Honda a finales de 1992 y ahora el equipo era propulsado por Ford. 

Williams, mientras tanto, era el equipo que había ganado el título de la temporada anterior con Nigel Mansell y lucía una decoración (en azul) donde SEGA encajaba más. Además, Senna quería fichar por esta formación, a la que se uniría en 1994.

El resultado soñado por SEGA para la carrera celebrada en Donington Park era una victoria de Alain Prost o Damon Hill, los pilotos de Williams en 1993. Sin embargo, apareció su viejo amigo Ayrton Senna para realizar una de las mejores actuaciones jamás vistas en una carrera de F1.

El piloto de Sao Paulo, que arrancó aquella cita desde la cuarta posición, consiguió finalizar la primera vuelta en cabeza, después de superar magistralmente a los Williams de Prost y Hill bajo un aguacero que hoy habría retrasado el inicio de la carrera prácticamente hasta que el asfalto estuviera seco. 

Ayrton ni siquiera necesitó el mejor coche de la parrilla para terminar doblando a todos los coches excepto al segundo clasificado, Hill, que terminó a 1 minuto y 20 segundos. Hasta su archirrival, Prost (3º), terminó la carrera con una vuelta perdida. Su dominio fue tal que al quinto y sexto clasificado le sacó dos vueltas. Impresionante.

Con todo ello, quien levantó el trofeo preparado para la ocasión, una figura de Sonic The Hedgehog con las letras de SEGA en la base, fue ni más ni menos que Ayrton Senna. Esta fue una de las cinco carreras que ganó en 1993 Ayrton, quien terminó subcampeón aquella campaña. Los Williams se repartieron diez triunfos en total, resultando Prost campeón.

La historia del trofeo de Sonic no termina aquí. Ya fuese por la rabia de haber tenido que levantar la figura de una marca que apoyaba a un equipo rival, por no tener relación comercial con SEGA o porque odiaba todo lo que no respetara lo tradicional y elegante, la leyenda cuenta que Ron Dennis, entonces jefe de McLaren, prohibió que el galardón fuese expuesto en las vitrinas de la escudería.

Por inverosímil que parezca, hasta que la formación de Woking, ahora capitaneada por Zak Brown, decidió rescatarlo en 2020 y llevarlo a la vitrina de trofeos, la figura de Sonic estuvo guardada en una estantería de la fábrica. Los aficionados reclamaron un mejor lugar para el afamado erizo cuando lo mostraron en una fotografía en 2018... y la 'nueva' McLaren escuchó.