El futuro ecléctico del motor español de un tiempo que revoluciona el sector
La industria del automóvil ha apostado por la electrificación total, sin embargo, ese proceso no se está desarrollando por le camino correcto. INNengine apuesta por un futuro ecléctico en el que se combinen lo mejor de los motores eléctricos y de los motores de combustión.
El futuro de la movilidad será eléctrico. Al menos, así es como se está planteando. Pero esa electrificación no se está llevando a cabo por el camino correcto. Así lo expresa INNengine, la empresa española que ha desarrollado un motor de un tiempo que revoluciona el sector. Ese futuro será ecléctico.
‘El futuro es ecléctico’. Este es el nuevo lema de INNengine con el que quiere hacernos reflexionar sobre cómo se está desarrollando la electrificación. Y es que la industria del automóvil está confiando la reducción de las emisiones al uso exclusivo de vehículos eléctricos puros, que requieren grandes y pesadas baterías.
Pero la producción de baterías requiere la extracción de minerales que son muy escasos y, por tanto, son muy caros. Por eso, los coches eléctricos son tan caros. Y luego hay otro factor determinante: el peso. Estos tres elementos restan eficiencia a la movilidad eléctrica tal y como está planteada en estos momentos.
Por eso, INNengine aboga por un uso combinado de ambas tecnologías, la eléctrica y la de combustión, de manera que permita fabricar baterías más pequeñas y, por tanto, menos pesadas, que requieran de menos materiales, y motores muy compactos que ofrezcan una amplia autonomía.
El futuro ecléctico del motor español de un tiempo que revoluciona el sector
Hay una pregunta clara que todos nos debemos hacer: ¿Qué es mejor, un coche eléctrico puro con una batería de 100 kWh (muy pesada y cara de producir) o seis coches con una batería de 15 kWh?
Las materias primas de las baterías son escasas. Además, el 90% de la conducción diaria está por debajo de los 100 kilómetros, por lo que cualquier batería por encima de los 15 kWh está malgastando el 90% del tiempo.
Si los vehículos fueran entre un 15 y un 20% más ligeros, se podía ahorrar mucha energía, emisiones de CO2 y, en definitiva, reducir significativamente la contaminación.
Un motor e-REX de INNengine equivalente a un motor tradicional de 2.0 litros pesa sólo 35 kg, lo que permite instalarlo en el mismo espacio y peso que un motor tradicional. Esto se traduciría en un ahorro energético de hasta el 40%, según la compañía española.
Siguiendo un criterio medioambiental, volvemos a formular la pregunta de antes: ¿qué es mejor, un único vehículo funcionando con electricidad en todo momento o seis vehículos con un motor e-REX funcionando en modo eléctrico el 90% del tiempo?
Es mucho más eficiente y responsable con unos recursos ya de por sí escasos fabricar muchas baterías pequeñas que unas pocas muy grandes. Y, además, sin tener problemas de infraestructuras de carga, ni tener que modificar la actual infraestructura eléctrica.
Los usuarios, por su parte, tampoco tendrían que preocuparse de instalar puntos de carga en sus bloques de pisos ni preocuparse por quedarse sin batería.
Los mejor de dos mundos
La industria automotriz está invirtiendo grandes cantidades de I+D en la electrificación pura, sin tener en cuenta que esto también tiene un notable impacto en el medioambiente.
El problema es que se pone el foco en las emisiones directas que producen los automóviles, es decir, las que salen por el tubo de escape. Sin embargo, en necesario hacer un estudio mucho más profundo, teniendo en cuenta las emisiones que produce un coche eléctrico desde su fabricación y durante toda su vida útil.
Del mismo modo, conviene analizar el origen de la electricidad con la que se recargan las baterías, que muchas veces procede de fuentes fósiles. No valorar estos dos factores, la huella de carbono y el origen de la electricidad, sería irresponsable.
Por eso, para INNengine, el futuro es ecléctico, es decir, hay que combinar lo mejor de la tecnología eléctrica y los motores de combustión.
Los motores eléctricos son más limpios y eficientes, mientras que los de combustión son más ligeros, tienen más potencia específica y proporcionan mayor autonomía. La solución pasa por la unión de ambas tecnologías.
Etiquetas: Tecnología
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