Mucho se ha hablado sobre la necesidad de que el uso de guantes sea obligatorio en las motos, así como ir correctamente vestido sobre el vehículo de dos ruedas. Sin embargo, un estudio realizado por una aseguradora alemana afirma que el equipamiento utilizado por los motoristas es poco eficaz ante impactos a más de 25 km/h. Salvo el casco, que sí supone el principal salvavidas del motorista en la carretera. 

Esto alimenta la teoría de que ante un accidente, el motorista está prácticamente indefenso. No hay más protección que el casco, ya que incluso los novedosos sistemas de airbag para motoristas, que despliegan una bolsa de aire en zonas sensibles como la espalda en caso de accidente, no son eficaces a más de 50 km/h. 

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Ahora bien, este estudio habla únicamente de impactos o accidentes contra algo, y eso es algo que más o menos nos podíamos imaginar. Está claro que si un motorista choca contra un coche o contra un muro, la ropa poco puede hacer. Sin embargo, sí es útil contra abrasiones y contra raspadas al resbalar sobre el asfalto en caso de caída. Una de sus principales funciones es esa y ahí sí cumplen con nota, especialmente las prendas de cuero o las de textiles reforzadas con kevlar.

Está claro pues que ante un accidente, los motoristas tienen todas las de perder, como así lo demuestra el claro repunte de víctimas motoristas que hemos vivido en los últimos años. El casco vuelve a mostrarse como el principal elemento de seguridad, aunque lo mejor es conducir con cabeza y evitar imprudencias que nos puedan costar la vida. 

La industria busca siempre mejorar la seguridad de los motoristas, pero hay cosas que son bastante evidentes: en caso de impacto, un motorista carece de cualquier tipo de carrocería o de sistema de protección extra que pueda salvarle la vida. Solo el casco lo puede hacer, por lo que además de invertir en equipamiento como ropa o guantes, debes invertir en mejorar tu nivel de conducción y, sobretodo, ser prudente al máxima. Tu vida, sobre la moto, está siempre en juego.