Cupra Born o VW e-Golf, ¿cuál es mejor?

Dentro del Grupo Volkswagen hay una auténtica oleada de nuevos coches eléctricos dentro de todas sus gamas, pero en la vida hay que recordar de donde venimos. Por eso, vamos a poner cara a cara al Cupra Born, el primer cero emisiones de la marca, con el VW e-Golf, el que fuera uno de los pioneros eléctricos dentro del grupo.

Eso sí, comparado con otros enfrentamientos que solemos hacer, éste tiene la peculiaridad de que el Volkswagen ya no se fabrica y es imposible comprar uno nuevo.

Esto influye en los precios, algo que trataremos al final, pero también en otros aspectos como la mecánica, algo común a todos los coches de segunda mano, o al hecho de que su autonomía será menor de lo anunciado en su día, por el desgaste, algo que ocurre con los coches eléctricos.

Diseño

Nos encontramos ante dos tendencias de diseño completamente distintas, puesto que, mientras el Cupra fue concebido desde cero, el Volkswagen es una variante derivada del Golf convencional. Además, se trata de generaciones previas del compacto. Lo bueno es que, dada la continuidad del modelo, tampoco se nota demasiado envejecido.

El Born es el que tiene el aspecto más moderno de los dos, lógicamente, pero también destaca sobremanera por el hecho de que Cupra le ha dado un toque claramente deportivo. 

A pesar de ser voluminoso, se siente estilizado, transmite cierto dinamismo y los detalles de color cobre llaman considerablemente la atención.

A su lado, el Volkswagen Golf es mucho más moderado, pasando desapercibido junto a otras versiones del modelo salvo por detalles específicos como sutiles toques azules en los faros delanteros y la parrilla, así como las llantas con un diseño específico para ser más aerodinámicas.

Dimensiones

Da la impresión con un primer vistazo, pero los datos lo confirman: el Born es más grande en todas sus cotas. Tiene una longitud de 4.322 mm, una anchura de 1.809 mm y una altura de 1.540 mm, con una batalla de 2.766 mm. Además, su maletero tiene una capacidad de 385 litros.

Volkswagen e-Golf mide 4.254 mm de largo, 1.789 mm de ancho y 1.491 mm de alto, con una distancia entre ejes de 2.619 mm. Su maletero cubica 381 litros.

Mecánica eléctrica

De nuevo hablamos de dos mundos distintos, puesto que el Cupra monta una tecnología eléctrica mucho más avanzada y emplea la plataforma modular eléctrica (MEB) que comparten todos los cero emisiones del grupo.

Su variante básica emplea un motor de 204 CV (150 kW) de potencia que se combina con una batería de 58 kWh de capacidad, lo que le permite acelerar de 0 a 100 km/h en 7,3 segundos y homologar una autonomía de 416 kilómetros.

Recientemente se ha sumado la versión e-Boost, que desarrolla 231 CV, acelera de 0 a 100 km/h en 6,6 segundos y monta la misma batería, aunque próximamente también podrá montar la de 77 kWh de capacidad.

Por parte del Volkswagen Golf eléctrico, en una primera etapa se ofrecía con 115 CV (de 2014 a 2016), pero en su última entrega mejoró su rendimiento mecánico.

Desde 2017 a 2020 pasó a desarrollar 136 CV y 290 Nm de par, montaba una batería de 35,8 kWh y su autonomía homologada era de 300 kilómetros, pero como era según el laxo ciclo NEDC, los valores reales serían más cercanos a los 200.

En cuanto a prestaciones, acelera de 0 a 100 km/h en 9,6 segundos y tenía una velocidad máxima de 150 km/h.

La clave además está en el hecho de que al estar disponible solo de segunda mano, lo lógico es que las baterías estén desgastadas y hayan perdido parte de su capacidad, por lo que su autonomía real será inferior que la oficial (hasta que punto depende de cada unidad).

Precio

El Cupra Born es el modelo más caro del duelo, con un precio de partida de 39.690 euros.

Si hablásemos de un VW e-Golf nuevo la cosa estaría más igualada, puesto que en su día costaba 32.985 euros, pero actualmente solo pueden comprarse de segunda mano. En el mercado de ocasión sus tarifas oscilan entre los 18.000 y los 28.000 euros.