¿Cómo se puede grabar a un Bugatti Chiron a 400 km/h?

En 2017 asistimos a una de las demostraciones de poderío más impresionantes que se recuerdan en la historia del automóvil. El Bugatti Chiron fue capaz de acelerar desde parado hasta 400 km/h y volver a detenerse por completo en 41,96 segundos. Se grabó en vídeo, y de hecho se ha convertido en uno de los más populares con este hypercar como protagonista. Pero, ¿alguna vez te has preguntado cómo se consiguió filmar algo así?

Poco después de publicar el vídeo, fue la propia Bugatti la que confirmó que la única manera de grabar al Chiron a esa velocidad fue usar otra unidad del vehículo que calcase los movimientos de la conducida por Juan Pablo Montoya unos metros por delante. Es decir, hubo dos Chiron que lograron el hito, pero uno lo hizo en la sombra. Ahora, los detalles de aquel día quedan al descubierto gracias a uno de los responsables de la grabación.

No te pierdas: Prueba del Bugatti Chiron, no es de este mundo

El Bugatti Chiron que iba por delante, pintado de blanco, llevaba instalada en su parte trasera una pequeña cámara que fue la encargada de grabar a la unidad que iba a conseguir la marca, negra para más señas. Éste circuló por el otro carril derecho de la autopista donde se grabó todo, mientras que el otro Chiron disponía de los otros dos.

La pega de todo esto llegó al comprobar la grabación bruta, y es que era excesivamente suave. No era capaz de reflejar lo que debería sentirse al ver a un coche a semejante velocidad. Por tanto, en la fase de montaje se decidió añadir algo de vibración a la imagen para dotarla de vida.

Otra de las peculiaridades que se nota al ver el vídeo en bruto es que hay momentos en los que el Bugatti Chiron negro se ve como desenfocado. La culpa la tuvieron los gases de escape emitidos por el coche que iba delante, que para más señas aumentaron según subían ambos coches de velocidad. De nuevo, la postproducción hizo magia, tanta que el vídeo ya tiene más de 100 millones de reproducciones.