Los cinco peores rivales del Renault Rafale

Recientemente presentado, el Renault Rafale es la gran baza de la marca del rombo para conquistar el segmento de los SUV intermedios, apostado por un diseño deportivo y coupé, como ya hiciera con el Arkana. Pero no lo tendrá fácil, porque tendrá enfrente a duros rivales.

Con el Rafale, Renault nos presenta un producto dirigido a un público que, además de amante de los todocaminos, busca algo más, un vehículo con un aspecto dinámico, un puesto de conducción elevado, pero con un comportamiento preciso, propio de un turismo.

Comparte plataforma con los últimos modelos de la marca francesa, el Austral y el Espace, es decir, la arquitectura CMF-CD de tercera generación. Y hay que destacar también que se trata de un producto 100% español, ya que se concibió en la planta de Valladolid y se fabricará en la de Palencia (la caja de cambios en Sevilla).

Sus principales bazas son, además del diseño coupé, un interior muy cuidado, una calidad de materiales buena, un equipamiento tecnológico elevado y motores potentes y eficientes, aunque inicialmente sólo contará con el híbrido de 199 CV. El año que viene llegará un híbrido enchufable con 300 CV.

Peugeot 408

El Peugeot 408 es el gran rival directo del Renault Rafale. De hecho, estéticamente se parecen un poco (habría que ver si se diferencian desde el retrovisor). Pero, más allá de cuestiones estéticas, el 408 tiene algunas ventajas, de momento.

No sólo por el hecho de haber llegado antes, sino porque cuenta con una oferta mecánica más elaborada, con un motor de gasolina de 131 CV, que hace de acceso a la gama, y dos variantes híbridas enchufables, con 180 y 225 CV. 

Además, en los próximos meses, la gama se completará con una opción totalmente eléctrica (e-408), cosa que no tendrá el Rafale, al menos no está en los planes de Renault en estos momentos. 

A nivel de acabados y equipamiento, se puede decir que ambos modelos están a la misma altura. En este sentido, es difícil encontrar diferencias sustanciales.

Citroën C4 X

Otro rival del Renault Rafale lo encontramos en el mismo grupo Stellantis, el Citroën C4 X. se trata de una propuesta similar, en tanto que se trata de una especie de crossover pero con rasgos que mezcla una berlina con un coupé (a veces es complido ubicar un modelo).

En cualquier caso, el modelo de Citroën logra un efecto parecido al del Rafale, es decir, un turismo sobreelevado, con cierto aspecto coupé. Como se puede aprecia, deriva del C4 normal, al que se le ha añadido un tercer volumen y una caída prolongada del techo.

También cuenta con una oferta mecánica más variada, sin estar excesivamente nutrida, con un 1.2 PureTech de 100 y 130 CV, un diésel BlueHDI de 130 CV y dos opciones eléctricas, con 136 y 156 CV y una autonomía de 360 y 420 kilómetros, respectivamente y etiqueta CERO.

Cupra Formentor

El Formentor es claramente más compacto que el Renault Rafale, pues mide 4,46 metros de longitud, frente a los 4,71 del francés. Sin embargo, lo incluimos en esta lista de rivales por su diseño coupé. 

Para quien priorice el dinamismo en la conducción, el Cupra es, sin duda, la mejor opción. Quizá por ello se haya convertido en un auténtico superventas. 

Otra baza del Formentor es su amplia gama de motores: se puede elegir con un diésel de 150 CV, cinco opciones de gasolina, con 150, 190, 245, 310 y 390 CV, con cambio manual o DSG según versiones, y dos variantes híbridas enchufables, con 204 y 245 CV y etiqueta CERO. Imposible tener más opciones.

Audi Q5 Sportback

Nos introducimos ahora en el segmento premium, donde aparece el Audi Q5 Sportback. Renault es una marca generalista, pero puede competir igualmente con modelos como el Audi.

A parte de un diseño que reúne las misma características, el alemán ofrece un mayor equipamiento, sobre todo a nivel tecnológico, y un nivel de acabados más elevado. A falta de ver cómo se comporta el Rafale, el Q5 Sportback es muy silencioso y refinado en carretera. 

La gama de motores se compone de versiones diésel y de gasolina, todas con un sistema Mild Hybrid de 48 voltios, lo que le vale para obtener el distintivo ambiental ECO. Hay también dos opciones híbridas enchufables, con 299 y 367 CV, y etiqueta CERO.

Alfa Romeo Stelvio

Terminamos con el Alfa Romeo Stelvio, un SUV que, si bien no tiene una estética coupé como todos los modelos anteriores, pero comparte casi las mismas dimensiones y el mismo enfoque deportivo.

Junto con el Formentor, el Stelvio es la opción más recomendable para quienes busquen un SUV con un tacto de conducción muy dinámico, más parecido a un turismo que a un todocamino con un centro de gravedad más elevado.

El punto flaco, frente al Rafale, es que no cuenta con ninguna opción electrificada. Se ofrece con dos versiones diésel, una con 160 y otra con 209 CV, y una de gasolina con 280 CV, todas con cambio automático de ocho relaciones y tracción total (excepto la menos potente, que es trasera).