Audi declara la guerra publicitaria a Mercedes y BMW

Audi acaba de publicar un nuevo anuncio del nuevo Audi A3 Sedan que no puede ser más sarcástico. No cortos ni perezosos, los publicistas de Audi se han propuesto arremeter de la forma más dura posible a BMW y Mercedes. Por supuesto, Lexus no se queda fuera de esta guerra publicitaria.

“No te avergüences de tu primer coche de lujo”, con estas palabras tan duras los chicos de Ingoldstad quieren llamar la atención sobre todos sus posibles clientes en Estados Unidos. El vídeo comienza con una escena tan dura en la que un chico no quiere coger las llaves de un Mercedes CLA y cuando aparece un BMW Serie 3, una chica sale diciendo la palabra “vergüenza”.

La historia del anuncio (en inglés) es la siguiente: hay gente que cae en la tentación de conducir un 'coche de lujo cualquiera', y que no son capaces de esperar a la llegada de uno que merezca realmente la pena (en referencia al Audi A3 sedán). Por ello, muchos de los protagonistas que han podido "aguantar" afirman que fueron tentados (el coche de lujo de empresa, el coche de sus padres, el de un amigo en una fiesta...). Pero lo evitaron, y dicen, orgullosos:"I'm waiting" ("Estoy esperando"). ¿A qué? A la llegada del Audi A3 Sedán. Los que no pudieron evitar la tentación, se sienten totalmente avergonzados (ni siquiera muestran su cara).

No es la primera vez que los fabricantes de coches de lujo se tiran los trastos en Estados Unidos, donde la legislación permite arremeter contra los rivales (en Europa, a no ser que sea una comparación entre productos puramente informativa, no está permitido). Solo tienes que recodar el 'spot' que realizó Jaguar, que parodia un spot de Mercedes. Pero como en esta noticia hablamos de vídeos, ironía y publicidad agresiva... ¡Lo mejor es que veas el anuncio!

Si llevas un rato de risas y quieres seguir con esta sesión extra de humor, te recomiendo que no te pierdas 'La guerra publicitaria de las marcas de coches'. Podrás comprobar cómo, en EEUU, los fabricantes de automóviles llevan muchos años dándose donde más duele.