Comparativa: Mercedes Clase A 250 vs Volkswagen Golf GTI Performance

Bonito y tecnológico. Esto ya lo sabíamos del nuevo Mercedes Clase A, pero, ¿también puede ser veloz? Lo hemos enfrentado a su principal rival para comprobarlo, en esta comparativa del nuevo Mercedes Clase A 250  contra el Volkswagen Golf GTI Performance.

El nuevo sistema multimedia MBUX de Mercedes lo sabe todo, y lo encuentra todo. O al menos, casi todo. Porque si le preguntamos por la trayectoria ideal a seguir en el circuito de Contidrom, no obtenemos respuesta. Pero sería demasiado, claro. Y eso que vamos sentados en el tope de gama, el A 250 con 224 CV.

VÍDEO: ¡Así de seguro es el Clase A!

Y ya conocemos el circuito (y su trayectoria ideal) de fabricante de neumáticos Continental, en Hannover. El Volkswagen Golf GTI, en su variante Performance, entrega 245 CV, 15 más que el GTI normal. Pero las primeras rondas en el tramo de 'handling' decepcionan un poco, en ambos casos. Pero empecemos por los habitáculos. Los asiento en ambos casos recogen bien el cuerpo para una conducción decidida. El cockpit del Volkswagen no es tan inteligente como el de su rival, pero a cambio tienen un concepto de manejo perfecto: es realmente cómodo e intuitivo. Solo echamos en falta una rueda para el volumen.

¡Al circuito!

Y ahora sí: en circuito, los dos acusan su tracción delantera y son bastante subviradores, lo perjudica una y otra vez los tiempos por vuelta. Por eso volvemos a boxes y sacamos aire de los neumáticos. De este modo, aumentamos el grip. Y lo cierto es que da resultado. El A 250 se deja guiar de una forma mucho más fluida por las curvas, desliza mucho menos y el agarre es claramente mayor.

Especialmente en las marchas bajas, el dos litros turbos responde muy vivo al acelerador, el cambio de doble embrague y siete velocidades inserta con mucha rapidez las tres primeras marchas y, hasta los 100 km/h, va pegado a la zaga del GTI, aun con su déficit de potencia. Pero en las rectas largas, el Golf se le escapa. Y es que cuando sube de velocidad, el A 250 pierde su ansia por subir de vueltas. La marca de los 200 km/h las alcanza cuatro segundos más tarde que el Golf. Con todo, el Clase A subvira antes que el Golf, y obliga por tanto a corregir más a menudo.

El Mercedes frena antes, pero...

Con sus 35 metros para detenerse desde los 100 km/h, el Mercedes es mínimamente mejor, pero en un uso intensivo los frenos pierden el mordiente antes. Por eso, el punto de frenada se hace cada vez más lejos de la entrada en cada curva.  

El Golf GTI se muestra más relajado y aplomado, y con la presión de las ruedas corregida, tiene una respuesta muy neutral en los giros. Ojo, que también subvira al límite, pero es capaz de mantener el curso más tiempo, y pierde por tanto menos tiempo frente al crono. Con todo, el GTI tampoco es un auténtico deportivo, aunque pone muchas ganas para que lo parezca.

Y a eso añade un motor turbo ávido por subir de vueltas, que estira desde abajo como si no hubiera un mañana. Al final, el Golf hace su mejor ronda en 1:39,71 minutos, más de medio segundo antes que el Clase A. A eso hay que añadir que, como el Mercedes solo puede pedirse con el cambio de doble embrague, su precio de partido está varios miles de euros por encima. Por eso, en esta comparativa, es el Golf el que queda en primer puesto.

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