‘Crash-test’ para perros: este verano, ¡átalo bien!

Un coche choca a 40 km/h contra un muro. El perro, que va sin agarrar en el asiento de detrás, vuela por el habitáculo y se estampa contra el salpicadero. La consola centrar se resquebraja y la palanca del cambio se dobla como si fuera de goma. No nos sorprende, porque un impacto a esta velocidad equivale a si el animal pesara 1.600 kilos. Por suerte, no hablamos de un perro real, sino de un ‘dummy’ canino.

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Se trata de un ‘crash-test’ realizado por Allianz para demostrar lo peligroso que es llevar un perro suelto por el coche, o al menos sin estar convenientemente amarrado. La mascota artificial pesa 35 kilos y se llama Rex. El test demuestra que una mascota alojada convenientemente tiene muchas más posibilidades de sobrevivir en caso de accidente, y sobre todo: no pone en peligro al resto de los ocupantes.

Otro test de choque demostró que un can de siete kilos convenientemente amarrado hubiera sobrevivido a este accidente. Pero la conclusión es clara, a tenor de los resultados: la mejor manera de proteger a tu mascota es seguir lo que dice la ley: que vaya bien atada o en una caja especial enganchada en el maletero, justo detrás del respaldo trasero. SI aun tienes dudas, no te pierdas este Práctico sobre cómo viajar con tu perro en el coche.