Logo Autobild.es

Test 100.000 km VW Passat: ¡corre!

Test 100.000 km VW Passat
Volkswagen vuelve a fabricar coches fiables.

Esta es la imagen del perfecto inicio de un test de larga duración el VW Passat: nada más recogerlo en Hamburgo (30 de mayo de 2016), le hicimos 5.300 kilómetros en los primeros 10 días. Nuestro coordinador de pruebas, escribía en el cuaderno de viaje que habíamos empezado "un supertest de largo recorrido". Y añadía: "¡Es que no me quiero bajar!".

VÍDEO: Cara a cara Peugeot 508 vs Volkswagen Passat

Ante semejante comentario, uno podría pensar que la función de masaje del asiento del conductor, especialmente en viajes largos, funciona de maravilla. Pues no fue así. Cuando el cuentakilómetros marcaba 12.986 podía leerse en el libro de viaje: "Es el asiento con masaje más ruidoso del mundo. Cuando lo tienes un rato activado, te llega a poner de los nervios". Volkswagen conoce el problema y, de hecho, el departamento de atención al cliente ya había reportado el mismo ante las quejas de otros conductores. ¿El origen? Algunos elementos mecánicos del sistema de masaje rozan unos con otros. Un simple producto lubricante soluciona el problema.

Con el resto de los elementos de equipamiento opcional hemos tenido más suerte. Configuramos nuestra unidad de pruebas con 29, nada menos... Y, claro, cometimos la locura de llevar un Volkswagen Passat hasta más allá de los 50.000 euros. Pero el test ha demostrado que no fue una mala decisión. Porque, normalmente, cuantos más elementos de equipamiento opcional incluyas, más probabilidades hay de que algo se estropee. Pero en este test de los 100.000 kilómetros ha quedado demostrado que cuando algo se hace bien, funciona perfectamente.

Tres secretos del interior del Volkswagen Passat

Y esto es lo que sucedió con nuestra unidad de pruebas. Uno de nuestros redactores lo resumía muy bien en una frase del cuaderno de bitácora: "Es de esos coches que consiguen rápidamente que desees que sea tuyo".

El motor es maravilloso. Bajo el capó de un Passat Variant lo esperable era un diésel, pero el nuestro tenía un gasolina de 180 CV. Superó los temores de que consumiera una barbaridad. Al contrario, el gasto medio que hemos medido ha sido de 8,8 litros, a pesar de que muchos recorridos los hemos realizado por autovías alemanas sin límite de velocidad. Un consumo más que correcto, si añadimos el hecho de que en varias ocasiones este Passat ha tenido que cargar mucho peso. "¿Quién necesita un diésel, que hace que me apesten los dedos cada vez que lleno el depósito en un surtidor?", escribía en el cuaderno de viaje nuestro especialista en neumáticos. La potencia y el par motor son más que suficientes: con 250 Nm a partir de las 1.250 vueltas, aporta un empuje soberbio desde casi el principio. ¡Olvídate del diésel!

Incluso el cambio de doble embrague, que no es santo de la devoción de muchos colegas de la redacción, obtuvo aquí una nota mejor que la habitual. No llega a la suavidad de las inserciones de un convertidor de par, pero su conjunción con el sistema Start-Stop es, según uno de nuestros probadores, "bastante cómoda en ciudad".

Entonces, ¿no hay nada que criticar? Por supuesto que sí. Por ejemplo, las luces largas automáticas, que por su respuesta retardada provocaron los correspondientes bocinazos de los coches que venían por el carril contrario. El sistema de reconocimiento de señales, que indica los límites de velocidad, tampoco va muy fino. Por ejemplo, en las señalizaciones que hay en los pórticos suele fallar bastante. Por otro lado, el limpiaparabrisas, inexplicablemente, golpeaba cuando estaba a máxima velocidad contra el canto del techo.

¿Cuál es la mejor generación del Volkswagen Passat?

Pero lo cierto es que estos puntos críticos no llegaron a enturbiar la buena sensación general una vez completados los 100.000 kilómetros. Este VW puede presumir de una fiabilidad tan buena como la del memorable Escarabajo, aunque es evidente que la carga tecnológica del Passat esté a años luz de su predecesor. Solo tuvimos que pasar por el taller para las revisiones oficiales. Que hubiera que cambiar las pastillas y los discos de freno a los 90.000 kilómetros entra dentro de lo aceptable y, si tenemos en cuenta su potencia y el uso intensivo que le hemos dado, es incluso una cifra notable.

Este Passat se encontraba en tan buena forma después de los 100.000 kilómetros, que después de darle una limpieza al interior, parecía recién sacado del concesionario. Otro redactor apuntaba: "Este coche es leal como un buen amigo".

¿Cuál es mejor, el Mazda6 2018 o el Volkswagen Passat?

Como sucede con los buenos compañeros, uno solo se separa de ellos de mala gana. Por eso hemos decidido prolongar la relación. Después de que hayamos sometido a 150.000 kilómetros a un Golf Sportsvan, hemos decidido hacer lo mismo con este Passat y probar, de forma aún más intensiva, sus cualidades. Y es que lo vamos a someter, por ejemplo, a exhaustivas revisiones de la carrocería para encontrar cualquier rastro de óxido.

Como dice uno de nuestros probadores, "este Volkswagen es tan perfeccionista que te reta a encontrar una aguja en un pajar". Está por ver si la encontraremos a lo largo de los próximos 50.000 kilómetros. Nosotros vamos a seguir probándolo, anotando nuestros comentarios en el cuaderno de viaje y, sobre todo, disfrutando de su excelente conducción a diario.

¿Quieres saber cuál es tu coche ideal?

Valoración

Nota9

El Passat Variant con el motor de gasolina de 180 CV nos ha sorprendido de tal manera, que vamos a seguir conduciéndolo: ¡otros 50.000 kilómetros más!

Lo mejor

¡La calidad vuelve a Volkswagen! Pero en el pasado no siempre fue así y la culpa la tuvo la optimización de costes.

Lo peor

Nos ha costado dar con los pequeños fallos de este VW Passat

Descubre más sobre , autor/a de este artículo.

Conoce cómo trabajamos en Autobild España.