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Prueba Mercedes C350e: un híbrido más de la ‘ofensiva’

El Mercedes C350e es el híbrido enchufable de la marca alemana. Con una autonomía de 31 km y una potencia combinada de 279 CV, tiene prestaciones de Mercedes 190e 2.5 Evo II y un consumo de 2,1 l/100 km

El Mercedes C350e es un nuevo modelo más de la marca de Stuttgart en la ‘Ofensiva Híbrida’, como llaman ellos al hecho de que de aquí a 2017 va a haber 10 nuevos modelos enchufables. Se estrenaron con el S500 Plug In Hybrid y ahora le toca a su equivalente de las berlinas medias.

El Clase C híbrido estará disponible con carrocería familiar y berlina, algo que le diferencia del BMW Serie 3 Actyve Hybrid, que por el momento solo está como tres volúmenes (aquí te dejo más datos de este BMW híbrido de cuando lo probé en el circuito de pruebas de Miramas, en Francia).

En cuanto a motores, lleva un cuatro cilindros de gasolina con 211 CV que es el mismo que utiliza el Mercedes C250, modelo en el que se basa. El motor eléctrico aporta 60 kW (unas décimas menos de 81 CV) para lograr una potencia combinada de 279 CV y un par máximo que es una pasada: 600 Nm que están limitados electrónicamente. Además, se carga con rapidez: en un enchufe normal, en unas tres horas lo tienes al 100%.

El coche lo he probado por las carreteras de San Francisco, por lo que no me he atrevido a pisarle más de la cuenta: quizá he visto demasiadas películas en las que el Sheriff manda al cuartelillo al conductor con prisas y, la verdad, no tenía demasiadas ganas de acabar con mis huesos en el calabozo.

Pero lo cierto es que el Mercedes C350e se muestra poderoso si le pides ‘guerra’. Como buen Mercedes, tiene un rodar muy bueno. La suspensión Airmatic es de serie (no está mal para un coche que va a rondar los 50.000 euros) y la dirección también tiene el toque de la ‘Estrella’: suave y algo desmultiplicada. Aun así, el coche se muestra firme en todo tipo de carreteras y no es para nada un modelo aburrido de conducir.

En cuanto al funcionamiento como híbrido, es como el del Clase S híbrido enchufable, salvando las distancias. En el grande puedes hacer 33 km en modo eléctrico, por 31 en el C350e híbrido, y mantiene los mismos modos de funcionamiento: Híbrido, E-Mode (eléctrico puro), E-Save (te mantiene el nivel de carga en el nivel que llevas para poder circular en eléctrico en la ciudad) y Charge.

Este último modo es unas de las cosas en las que se diferencia con respecto al Serie 3 híbrido, que no lleva un modo de recarga –al menos no lo pensaban poner cuando probé el prototipo en Francia). A mí me gusta que exista; aunque es menos eficiente, te recarga el motor eléctrico para que puedas circular en modo ‘cero emisiones’ cuando te convenga. Esto es útil en ciudades como Londres, donde hay lugares en los que un coche de combustión no puede circular. Eso sí: el consumo de gasolina aumentará bastante…

Otra de las cosas que me gusta del Clase C híbrido es la transmisión que han escogido. Al igual que en el Mercedes Clase S Plug-In Hybrid (cambiará el nombre: pasará a llamarse Mercedes S500e, aunque no hay fecha), lleva la caja 7G-Tronic, lo que le hace muy agradable de conducir. No es comparable, claro, pero por ejemplo en Toyota y Lexus apuestan por un CVT que no acaba de convencer por tacto y en Peugeot con sus RXH ‘tiran’ de cambio manual pilotado. ¡Aquí puedes respirar tranquilo!

Una de las cosas más llamativas de este modelo es su conducción ‘predictiva’. Y es que, según Mercedes, la mejor estrategia para la eficiencia es conducir con anticipación. Es decir, que si sabes el destino al que vas a ir, el sistema controla la carga-descarga de la batería en función de la carretera. Por ejemplo, intenta que cuando vayas a entrar en la ciudad la batería esté cargada del todo.

Relacionado con esto está el pedal de acelerador háptico. Este ‘palabro’ se refiere a que el Mercedes C350e te va avisando de cuándo deberías levantar el pie para alcanzar un buen nivel de eficiencia. Por ejemplo, si te acercas a un coche que va más lento, sientes un par de golpecitos en el pie para que levantes: el coche se deja llevar hasta situarse a la velocidad del de delante. Además, en modo eléctrico, te marca la posición máxima a partir de la cual el motor de combustión va a tener que entrar en funcionamiento poniéndose duro en ese punto.

Con todo esto, el Mercedes Clase C350e se convierte en un coche bastante eficiente. Según la ficha técnica, la berlina puede hacer entre 2,1 y 2,4 l/100 km en función de las ruedas y el acabado, y el C350e Estate logra exactamente el mismo valor.

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El Mercedes C350e es el híbrido enchufable de la marca alemana. Con una autonomía de 31 km y una potencia combinada de 279 CV, tiene prestaciones de Mercedes 190e

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