Prueba del Dacia Sandero Stepway TCe 100 Eco-G: con gas, es aún más económico

Los precios especialmente bajos siempre han caracterizado a Dacia. Y ahora, la filial rumana de Renault se permite otra especialidad de ahorro: ofrece modelos de gas licuado, como este Dacia Sandero Stepway TCe 100 Eco-G que hoy probamos. 

Ventajas del llamado GLP (Gas Licuado del Petróleo): bajos costes de combustible y emisiones de CO2 comparativamente bajas. Con el Sandero, hemos elegido el modelo más pequeño de gas de Dacia, ¿realmente ahorra el pequeño vehículo?

Diseño

Como Stepway, el Sandero tiene una apariencia ligeramente más aventurera, mide 4,10 metros de largo, once milímetros más por tanto, y 88 más alto (incluida la barra del techo) que el hermano estándar. La verdadera ganancia está en los 201 milímetros de distancia al suelo, un aumento de 39, que ayuda aquí y allá sobre obstáculos, proporcionando al conductor una cómoda altura de asiento de 60 centímetros.

Debido a que la distancia entre ejes (2.604 mm) y las dimensiones interiores permanecen sin cambios, en el Stepway no hay más espacio. Los conductores altos se manejan bien en la parte delantera, pero los asientos podrían ser más firmes y, en general, más grandes. Por lo demás, el Stepway deja una impresión ordenada y bien pensada.

Motor

El turbo de un litro produce el característico sonido de tres cilindros, siempre presente, pero no molesto. Alimentado con gas licuado, proporciona 101 CV y 170 Nm de par, que funcionan de manera uniforme y armoniosa, aunque podrían tener un poco más de temperamento. En general, no es un coche  muy enérgico, y oficialmente tarda 11,9 segundos en alcanzar los 100 km/h, con una máxima de 174 km/h.

Dacia proporciona los mismos valores para el funcionamiento con gasolina, aunque en ese caso solo hay 91 CV y 160 Nm. El cambio de gas licuado a gasolina y viceversa se realiza con un simple toque y de manera completamente imperceptible. Sin embargo, se recomienda el funcionamiento a gas, ya que el motor con GLP parece un poco más suave y refinado. Y, por supuesto, reduce los costes.

Una gran autonomía

Dado que el poder calorífico de un litro de gas licuado es aproximadamente un 25% inferior al de un litro de gasolina, el Sandero consume naturalmente más gas que gasolina cada 100 kilómetros. Pero eso no importa, porque el gas es más barato que la 95. 

En resumen: aunque lo hemos probado en Alemania, con los precios de allí, el hecho de que cada kilómetro recorrido con gas ahorre aproximadamente cuatro céntimos, da una idea de la reducción de costes que conlleva. Y como tiene dos tanques (40 litros de gas, 50 litros de gasolina), teóricamente puede recorrer más de 1.300 kilómetros sin parar.

El modelo Stepway de GLP básico tiene un coste adicional de unos 600 euros en comparación con el modelo de gasolina TCe 90 puro se amortiza después de aproximadamente 15.000 kilómetros, tomando el ejemplo alemán. Y siempre con una una garantía de tres años (100.000 kilómetros).

Factores para decidir la compra

El Sandero siempre ha sido atractivo por su precio, y con la opción de gas licuado, repostar es aún más económico. Es ideal para quienes priorizan el ahorro, aunque las debilidades en cuanto a comodidad del modelo original permanecen sin cambios.