Mazda CX-30 o Renault Captur, ¿cuál comprar?
Nuestros protagonistas son dos SUV compactos de algo más de cuatro metros, Mazda CX-30 o Renault Captur, ¿cuál comprar?
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El Mazda se sitúa, por longitud, a medio camino entre el Renault Captur y el Renault Kadjar, ya que está en los 4,40 metros. El Captur mide 4,23 m, mientras que el Kadjar se va a los 4,49 m.
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Vistas estas, sus primeras diferencias, vamos a ahondar un poquito más en sus tamaños.
Medidas y capacidades
El Mazda CX-30 mide 4,40 metros de longitud, 1,80 de anchura y 1,53 de altura. Por su parte, el Renault Captur, lo dicho: es 17 cm más corto, tiene la misma anchura y es casi 5 cm más alto.
Estas medidas hacen que el Renault se vea menos dinámico y deportivo que el japonés.
Y, a pesar de su tamaño más pequeño, el Captur se defiende bien con un maletero de 422 litros que puede alcanzar los 1.275. El CX-30 registra un mejor dato, como sus medidas exteriores ya podían anticipar: de 430 a 1.406 litros de maletero.
En los asientos traseros, como te puedes imaginar y con estas medidas, ninguno de los dos es especialmente amplio, pero hay algo más de espacio para las piernas en el japonés, y algunos centímetros más para la cabeza en el francés.
Mecánicas disponibles
La gama mecánica del Mazda CX-30 está compuesta por una versión diésel Skyactiv-D de 116 CV y dos de gasolina Skyactiv-G de 122 CV y Skyactiv-X con 179 CV. Estos dos últimos motores de gasolina, cuentan con un sistema de hibridación ligera de 24 V.
Todos estos motores se asocian a un cambio manual de seis relaciones (de serie) o uno automático de tipo convertidor de par (opcional); los de gasolina, además, tienen la posibilidad de tener tracción integral.
Por su parte, el Renault Captur tiene dos motores diésel Blue dCi de 95 y 116 CV, mientras que entre los gasolina, podrás escoger entre tres variantes del TCe con 100, 130 o 155 CV.
Pero además, el de 100 CV también puedes pedirlo en versión GLP, para poder funcionar con este combustible además de con gasolina y, la principal novedad de este año: el E-Tech, un híbrido enchufable con etiqueta Cero de la DGT y más de 50 km de autonomía en modo eléctrico.
Hay cajas manuales de cinco o seis velocidades y automáticas de siete relaciones. Eso sí, el Captur no tiene la tracción integral que sí puedes elegir para el Mazda.
Unas por otras... empate técnico: más variedad mecánica para el Captur, pero sin posibilidad de la tracción total.
Prestaciones y consumos
Ya que ambos tienen un motor diésel de 116 CV, vamos a comparar las prestaciones con este motor. Por cierto, con este motor y el equipamiento base en ambos, el Mazda pesa unos 40 kilos más.
En el 0 a 100 km/h el Mazda para el crono en 10,8 segundos, mientras que el Renault lo hace en 11,9.
Si hablamos de sus velocidades máximas, las tornas se invierten, ya que el CX-30 alcanza los 183 km/h, mientras que el Captur se va hasta los 197 km/h.
Hasta aquí, podemos hablar de un nuevo empate. Pero si hablamos de consumos, el Captur es algo menos sediento, ya que el dato combinado en ciclo WLTP arroja una cifra de 4,7 litros cada 100 km, mientras que el Mazda se 'bebe' 5,1 litros.
Ligera ventaja para Renault.
Opciones
En sus equipamientos Origin del Mazda e Intens del Renault, ambos llevan luces LED de serie, por ejemplo, pero el japonés se descarta con algunos elementos muy interesantes de serie como el 'Head-Up Display', el climatizador bizona o el navegador. Mucho más interesante es el Renault Captur Zen, que lleva más equipamiento de serie.
Eso sí, las versiones del Mazda son bastante más cerradas, con menos opciones disponibles.
Precio
Esto siempre puede ser decisivo, ya que hasta aquí, ambos llegan bastante igualados.
Si comparamos el precio del motor diésel que veíamos de 116 CV, con los acabados de acceso a esta mecánica: Origin e Intens respectivamente, vemos que hay una diferencia de precio sustancial.
El Renault Captur puede ser tuyo por unos 22.400 euros, mientras que el Mazda CX-30 se va hasta los casi 30.000 euros.
Mucha, demasiada e insalvable diferencia que, a pesar de unos materiales y ajustes más cercanos a un segmento premium del japonés, y a su innegable y superior calidad de rodadura, hace plantearse seriamente su compra por estos más de 7.000 euros de diferencia.
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