El Volkswagen Touareg le puede seguir el ritmo a un Discovery en conducción off-road
Pongamos un SUV al lado de un todoterreno de la vieja escuela. ¿Cuál suele ser el primer pensamiento? “El todocamino no tiene nada que hacer contra el 4x4 cuando salgan del asfalto” o, los más críticos, “ese SUVebordillos es solo para ciudad”. Sea cual sea el tono, lo cierto es que la concepción general es que el segmento de moda no es excesivamente capaz en cuanto abandona la carretera, pero casos como el del Volkswagen Touareg rompen el prejuicio.
Los compañeros de The Fast Lane Car han hecho una de sus habituales comparativas off-road y para ello se han llevado al campo a una unidad del Volkswagen matriculada en 2004 y la han enfrentado a un Land Rover Discovery del mismo año. Por si la cosa no pareciera a priori desnivelada, el Touareg es completamente de serie y el Discovery cuenta con un sistema de suspensión específico que aumenta un poco su distancia libre al suelo.
Esto implica que el Land Rover utiliza ejes rígidos, un diferencial central, un motor 4.2 V8 y una caja de cambios automática de cuatro velocidades. Su rival, aunque de serie, cuenta con ciertos elementos muy interesantes si se trata de llevar a cabo una conducción off-road, como son los dos diferenciales, central y trasero; y la suspensión independiente y neumática. A eso hay que sumarle además la presencia de un motor 4.2 V8… aunque entre los contras están sus neumáticos, de fábrica y con poco o nada que ver con la actitud todoterreno.
A pesar de los clichés y de un punto de partida teóricamente peor, el Volkswagen Touareg se muestra como un modelo bastante capaz de seguir el ritmo a su contrincante.
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