El verano en España puede llegar a ser sofocante en determinadas áreas del país. Si, además, no puedes disfrutar de unas merecidas vacaciones durante los dos meses más calurosos de la estación estival, usar el coche se convertirá en algo que no querrás hacer. Especialmente si está aparcado al sol y tienes que subirte a él.

Por suerte, la infinita mayoría de coches están equipados de serie con aire acondicionado, un sistema que te permite regular la temperatura del habitáculo con frío en verano y calor en invierno. Sin embargo, no todo el mundo sabe cómo aprovechar al máximo el aire acondicionado de su coche y esto provoca que no disfruten de una temperatura agradable y segura para conducir.

El impactante consumo oculto del aire acondicionado de tu coche

En este artículo te vamos a mostrar tres formas de aprovechar al máximo el aire acondicionado de tu coche. Es clave saber usar este sistema para que trabaje adecuadamente y alcanzar la temperatura deseada en el menor tiempo posible.

Tres formas de aprovechar al máximo el aire acondicionado de tu coche

Primero, deja salir el aire caliente

Si has dejado aparcado el coche a pleno sol durante algunas horas, en el interior hará tanto calor que será complicado concentrarse para conducir e incluso tocar superficies de contacto como el volante o la palanca de cambios. Además, si conectas el aire acondicionado, el sistema tendrá que trabajar a pleno rendimiento para tratar de enfriar el habitáculo.

Como no es eficiente ni eficaz, lo primero que debes hacer es dejar salir el aire caliente del interior. Si no tienes prisa, abre las puertas y el maletero, y permite que el habitáculo se ventile. Si no puedes esperar, arranca el coche, bajas las ventanillas y conecta el aire acondicionado. Circula unos minutos de este modo, permitiendo la rápida evacuación del calor.

Elige una temperatura óptima

Tan importante es dejar salir el calor del interior del coche, cómo elegir una temperatura óptima en el climatizador. Nuestro primer recurso es bajar al máximo la temperatura del aire acondicionado, lo que provoca una vez más que el sistema deba trabajar al máximo rendimiento e incluso que aumente el consumo de carburante.

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Lo que debes hacer para aprovechar todo el potencial de la climatización de tu coche es configurar el climatizador a una temperatura que oscile entre los 22 y 24 grados. Además, sitúa las salidas de ventilación hacia arriba (no directo a la cabeza o el cuerpo de los pasajeros), creando así un efecto cortina de aire que mejora sustancialmente el confort a bordo.

Cambia el filtro del habitáculo

Por último, el mantenimiento del sistema de aire acondicionado es clave para su correcto funcionamiento. Si no quieres sorpresas cuando hace más calor (como que el climatizador deje de funcionar), revisa periódicamente todo el sistema en un taller especializado.

Respeta los intervalos de sustitución del filtro del habitáculo, que se encarga de evitar que el polvo y los alérgenos accedan al interior del coche a través del aire acondicionado. Si está muy obstruido, se reduce el rendimiento de la climatización. Recuerda, además, realizar una recarga del gas del aire acondicionado cuando percibas que su capacidad para enfriar se ha visto disminuida.