Suzuki Jimny, las cinco grandes diferencias con su predecesor
El nuevo Suzuki Jimny ha sido un éxito total, se mire por donde se mire: su imagen ha encandilado a todo el mundo, sigue siendo un todoterreno de lo más capaz y la demanda ha pillado desprevenida hasta a la propia Suzuki. En estas circunstancias es probable que nadie se acuerde de la generación previa, una que estuvo a la venta nada menos que 20 años. Vamos a ver las diferencias que hay entre ambas para ver todo en lo que ha mejorado.
Diseño
Salta a la vista y es que, aunque el anterior Jimny no estuviera mal en su momento, dos décadas le pesan a cualquiera. El nuevo ha optado por un diseño con ciertos toques retro que ha sido todo un acierto. La apuesta por las líneas rectas tiene un doble beneficio, por un lado le da una imagen bastante contundente y, por otro, permite que desde el habitáculo sea muy fácil calcular las distancias (lo que le ha valido para ganar el premio al Coche Urbano 2019). Su diseño es robusto y sin excesivo recargo, a veces menos es más.
VÍDEO: Suzuki Jimny 2019, todos los detalles, especificaciones
Habitáculo
Si por fuera se notaba la edad, por dentro todavía más. Son dos interiores pertenecientes a épocas distintas y, lógicamente, sale ganando el moderno. También aquí se nota la búsqueda de la sencillez y, en líneas generales, es bastante más analógico que otros modelos lanzados recientemente, aunque si que cuenta con una consola central formada por una pantalla táctil.
Capacidad de carga
El tamaño de ambas generaciones es parejo, pero el nuevo Suzuki Jimny, con su formato, produce una sensación agridulce a la hora de meter bultos en el maletero. Por un lado, la nueva distribución de elementos en la zaga permite que el portón sea más ancho, lo que facilita la tarea; pero, por otro, hay visto reducida su capacidad de maletero, que antes era de 113 litros y ahora se queda en unos más bien escasos 85.
Equipamiento
Aunque la marca ha decidido mantener el nombre y la cantidad de acabados en las dos generaciones (JX, JLX y JLX MODE 3), las diferencias entre los elementos que traían consigo antes y ahora son sensibles.
Si en los básicos del modelo saliente la escasez de la dotación era patente, con apenas el aire acondicionado y dos airbags como elementos más destacados, en el nuevo todos traen de serie el volante multifunción, la radio con Bluetooth, la frenada automática de emergencia, las luces automáticas, el detector de fatiga o el sistema de reconocimiento de señales, entre otros.
Potencia
No es que el motor del Suzuki sea ahora muy potente, pero teniendo en cuenta que manejamos cifras de caballos bastante justas, cada uno cuenta. Su predecesor solo estaba disponible con un bloque gasolina de 85 CV que se asociaba exclusivamente a una transmisión manual de cinco velocidades. Ahora el propulsor entrega 102 CV y, además de una caja manual de cinco marchas también está disponible con una automática de cuatro.
Descubre más sobre Mario Herráez, autor/a de este artículo.
Conoce cómo trabajamos en Autobild España.