Renault y el diseñador Mathieu Lehanneur reinventan el 4L
Con motivo de su 60º aniversario, Renault se ha asociado con el diseñador Mathieu Lehanneur para reinventar el 4L en un concepto inédito llamado SUITE Nº4.
Este año, el Renault 4 celebra su 60º aniversario desde que fuera originalmente introducido en el mercado en 1961. Con toda la atención puesta en su más que confirmado regreso como coche eléctrico, Renault se ha asociado con el diseñador Mathieu Lehanneur para reinventar el 4L en un concepto inédito llamado SUITE Nº4.
El modelo es uno de los Renault más exitosos de la historia. Se produjo en 28 países, incluyendo España, donde se fabricaron 800.000 unidades, y se vendieron más de 8 millones de ejemplares en 100 países durante tres décadas. El Renault 4Ever, como se llamará el renacido modelo, es el futuro, pero hoy miramos al presente para descubrir este interesante concepto.
Renault y el diseñador Mathieu Lehanneur reinventan el 4L
Durante todo el año, la firma del rombo ha puesto en marcha diferentes iniciativas para rendir tributo al clásico Renault 4L. Una de las acciones, la penúltima este año, que prosiguen estas celebraciones es la asociación reciente con el reconocido diseñador Mathieu Lehanneur.
El producto de las conversaciones entre Mathieu Lehanneur y el equipo Couleurs et Matières de Renault Design es el concept car SUITE N°4, que ofrece una nueva experiencia del automóvil, un Renault para vivir en el interior y en el exterior.
La visión de Mathieu Lehanneur se alimentó de dos mundos paralelos: el automóvil y la arquitectura. SUITE N°4 es un coche espontáneo y un homenaje al Renault 4L, del que conserva el espíritu puro, sobrio y sencillo que da prioridad a la eficacia y la espontaneidad. Además, este concept car proyecta el modelo a través de las aspiraciones contemporáneas del diseñador.
El concept car mantiene las proporciones y las líneas exteriores del modelo icónico, pero se ha transformado de manera radical. La carrocería de la parte trasera y el portón se han sustituido por una cristalera de policarbonato que aporta la transparencia y luminosidad de una arquitectura de cristal.
En el techo, una rejilla de paneles solares deja pasar los rayos del sol en transparencia y ayuda, al mismo tiempo, a recargar la batería del vehículo, ahora transformado en un coche 100 % eléctrico. En la parte delantera volvemos a ver las luces icónicas, así como las líneas originales.
La calandra de aluminio pulido es la firma del diseñador a la vez que un canto a la evasión. La inspiración arquitectónica también se refleja en la carrocería que se ha tratado con una aleación de tres capas de pintura que reproducen el aspecto mineral del cemento.
El interior
En el interior, Mathieu Lehanneur optó por dar paso al ambiente y a los materiales de una vivienda y combinar las exigencias técnicas del automóvil con la sofisticación de cierto art de vivre a la francesa. Los asientos y el salpicadero están tapizados de un chispeante terciopelo amarillo.
En contraste, el espacio trasero luce un tejido grueso de chenilla de aspecto canalé y dos apliques luminosos que le dan un aspecto robusto. El maletero, transformado en una habitación móvil, se llena de almohadas y cojines.
La experiencia resulta perfecta con un banco de madera deslizante que se abre como un cajón extraíble y queda protegido una vez que se abre el portón. Como el 4L en su época, todos los tejidos son «made in France» y han sido realizados por artesanos parisinos.
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