NXT Rage: una nueva moto eléctrica a la vista

Desde 2017 lleva NXT Motors desarrollando la NXT Rage, una moto eléctrica de aspecto poderoso, práctica y cómoda pensada para ser utilizada todos los días. Y es que al fin y al cabo las motos eléctricas son interesantes especialmente dentro de la gran ciudad, ofreciendo eficiencia y practicidad en el día a día. Ahora bien, una moto urbana y eléctrica no tiene que ser siempre una aburrida scooter.

Ahí es donde entra en juego la NXT Rage y donde probablemente también lo hará la Lightning Strike: motos con un diseño muy cuidado y potente, pero a su vez prácticas, cómodas y muy eficientes para usar en el día a día. Con prestaciones más que aceptables pero con una autonomía que previsiblemente no les permitirán hacer grandes viajes sin tener que estar cada dos por tres parando a cargar las baterías.

Lamentablemente, NXT Motors todavía no ha dado todos los datos de su nueva moto eléctrica, aunque al parecer no tendremos que esperar mucho tiempo para conocer todos los detalles: tras su presentación en el Salón Motorbeurs 2019 en Utrecht, Holanda, el objetivo de la empresa es comenzar la fabricación en los próximos meses, en función de la demanda, entregando las primeras motos en Holanda a partir del próximo verano.

La NXT Rage tendrá un lanzamiento conservador en un mercado que todavía tiene que digerir esta nueva tecnología. Es cierto que en Holanda los vehículos eléctricos son ya bastante populares, por lo que parece que en una primera fase se centrarán en su mercado local para poco a poco ir abriéndose a nuevos mercados, siguiendo por sus vecinos belgas y luxemburgueses.

Es un plan conservador pero interesante para que la NXT Rage pueda sobrevivir en un entorno que va a ser muy competitivo en los próximos meses. Si la respuesta de los clientes es positiva y la producción poco a poco se va optimizando es muy probable que la NXT Rage termine llegando al resto de mercados europeos, aunque probablemente ya en el año 2020. Estaremos atentos a un proyecto que también tiene muy buena pinta: ¡la revolución eléctrica!