Este es el motor de cuatro cilindros más potente del mundo

La obsesión por reducir los consumos y, sobre todo, las emisiones para cumplir las normativas  anticontaminación lleva a los fabricantes a desarrollar mecánicas como esta, el motor de cuatro cilindros más potente del mundo.

Para construir un motor potente, hay dos opciones: aumentar el desplazamiento, es decir, la cilindrada o recurrir a la sobrealimentación. Desde hace años, la industria automotriz ha apostado por lo segundo para ofrecer prestaciones con bajos consumos y, sobre todo, menos emisiones.

Esto es lo que se conoce como Downsizing, algo que se puso de moda a partir de la década de los 2010 con los motores de tres cilindros y baja cilindrada, tanto de gasolina como diésel, en muchos casos de hasta 1.0 litros, pero con potencias de más de 100 CV, incluso 150 CV. 

Mercedes ha rizado el rizo y ha construido un motor de gasolina de cuatro cilindros en línea muy potente que monta en el Mercedes-AMG C 63 S E Performance, un bloque capaz de desarrollar nada menos que 476 CV, pero que, gracias a la tecnología híbrida, alcanza los 680 CV.

Tecnología procedente de la Fórmula 1

Se trata del motor M139L, con de la ‘L’ hace referencia a su disposición longitudinal. Y es, además, el primer motor producido en serie del mundo que utiliza sobrealimentación mediante un turbocompresor eléctrico. Esto ya nos explica un poco el porqué de su elevada potencia.

Esta nueva tecnología procede directamente de la Fórmula 1, donde es utilizada por el equipo Mercedes-AMG Petronas F1 Team, y garantiza una respuesta especialmente ágil e inmediata a lo largo de la escala completa de velocidad del motor.

Este es el motor de cuatro cilindros más potente del mundo

Este motor tiene cuatro cilindros y una cilindrada de 2.0 litros, algo que puede parecer convencional. Pero, gracias al turbo eléctrico, desarrolla 476 CV y 545 Nm de par. Además, se combina con un motor eléctrico de 150 kW (204CV) y 320 Nm de par. Todo esto hace que el sistema de propulsión alcance una potencia total de 680 CV y 1.020 Nm de par.

El sistema va ligado a una caja de cambios automática AMG SPEEDSHIFT MCT 9G de nueve velocidades y un esquema de tracción integral AMG Performance 4MATIC+ con distribución plenamente variable de par, además del Drift Mode. 

Con esta configuración, el Mercedes-AMG C 63 S E Performance acelera de 0 a 100 km/h en 3,4 segundos y alcanza los 280 km/h de velocidad máxima, controlada electrónicamente, si se añade el paquete opcional AMG Driver’s Package

Por otro lado, el sistema de propulsión tiene otro componente importante. Nos referimos a la batería que alimenta al motor eléctrico, de iones de litio de 6,1 kWh de capacidad y que proporciona una autonomía eléctrica de 13 kilómetros.