La marca japonesa regresa a la Fórmula 1 para
revivir una de las asociaciones que mayores éxitos han cosechado en
la historia de este deporte. Fernando Alonso
confía en que el proyecto de McLaren-Honda 2015 le
permita volver pelear por las victorias.
Especial Alonso vuelve a McLaren
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ficha por McLaren para 2015
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Alonso y Jenson Button ¿la pareja perfecta?
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ingeniero español clave para Alonso en McLaren
- Los
números de Fernando Alonso en McLaren en 2007
- McLaren, Honda y Alonso: un triángulo de
amor... ¡y odio!
- Ron
Dennis: "Alonso demostrará en McLaren que es un ganador"
- Alonso:
"Vuelvo a McLaren a terminar el trabajo que empecé en
2007"
- Button:
"Es un privilegio correr con Fernando Alonso"
Tengo grabadas en la memoria unas palabras pronunciadas por
Fernando Alonso durante un evento de uno de sus patrocinadores (en
Madrid) hace tan solo un par de años. Alonso afirmó, sin ningún
tipo de dudas que: "salir de McLaren fue la mejor decisión de mi
vida". No han pasado ni 30 meses de aquello y ahora el español
abandona el equipo en el que pensaba retirarse en busca de un
proyecto ganador. Un proyecto que podría haber encontrado en
Woking. Veamos en qué consiste.
El músculo de Honda
Que McLaren no atraviesa su mejor momento es evidente. De ahí
que su futuro genere tantas dudas como su presente. Llevan sin
ganar un título desde el Mundial de pilotos de Hamilton en 2008,
única corona conseguida en las últimas 15 temporadas.
Concretamente, en los dos últimos años han estado a su peor nivel,
coincidiendo, además, con la celebración del 50 aniversario del
nacimiento del equipo de Bruce. Una efeméride demasiado importante
que, sin embargo, quedó empañada por los malos resultados. La
solidez de su asociación con Mercedes en el suministro de motores
se acabó desplomando hasta el punto en el que, el año de entrada de
los motores V6 turbo (2014), las mecánicas alemanas han sido las
mejores de toda la parrilla y, sin embargo, McLaren ha vuelto a
cerrar un año en blanco.
Pero el cambio ya estaba decidido desde que en 2013 se anunció
el retorno de los japoneses al Gran Circo, campeonato que les
apasiona, en el que alcanzaron la gloria, precisamente, con el
equipo de Woking, y que tuvieron que abandonar por la puerta de
atrás después del fiasco de su proyecto como escudería en
2008.
De cara a 2015, Honda se ha instalado en el vecindario de Milton
Keynes, a tiro de piedra de Woking y Silverstone, en unas nueva
sede en las que solo se tienen que preocupar de hacer sus motores
de Fórmula 1. Una mecánica que llevan desarrollando durante los
últimos 14 meses en el laboratorio, con ingenieros desplazados a la
mayoría de circuitos del calendario para aprovecharse y tomar nota
de los fallos y problemas de sus rivales. En los últimos días han
dado un paso más al frente y han podido montar su nuevo bloque V6
en el chasis de 2014 para probar que todo está en su sitio. Lo han
hecho en Silverstone (en uno de los llamados filming day, limitados
a 100 kilómetros y con neumáticos de exhibición) y durante las dos
jornadas de tests en Abu Dabi. Han tenido problemas eléctricos,
pero nada fuera de lo normal en esta etapa del proceso de
desarrollo.
Fieles a su intachable honor, Honda ha renunciado a probar
durante el invierno en su propia pista de de Japón (donde se
podrían realizar determinados entrenamientos para no incumplir el
reglamento) y esperarán al inicio de la pretemporada en Jerez para
echar a rodar su nuevo motor en el chasis definitivo en el que irá
montado. Antes de que esto ocurra y, a pesar de que están siendo
súmamente discretos, algunas fuentes apuntan a que las primeras
cifras de rendimiento de este nuevo propulsor rondan los 875 CV,
cifra superior a la que podría manejar Mercedes el próximo año
incluso con el incremento de potencia de 40-50 CV que se espera que
consigan. Si Fernando Alonso exigió garantías técnicas para
encabezar el nuevo proyecto, sin duda que estas cifras podrían
convencer a cualquiera que busque con caballo ganador.
Un 'cerebro' renovado
Otro de los cambios que ya son efectivos en McLaren ha sido la
renovación de parte de su equipo humano. La reubicación de Ron
Dennis dentro de la división de coches de calle, dejó toda la
gestión del departamento de competición en manos de Martin
Whitmarsh, que finalmente fue despedido para dejar el equipo de
Fórmula 1 al hábil Eric Boullier, salido de Lotus. Por otro lado,
han hecho una importante leva de ingenieros por los boxes de sus
equipos rivales, siendo el más sonado el fichaje de la mano derecha
de Adrian Newey, el aerodinamista Peter Prodromou, que aterrizó en
Woking el pasado mes de septiembre después de llevar casi un año
con su nuevo contrato firmado. Ron Dennis, que volvió a pasar por
el garaje de McLaren durante esta temporada para supervisar todo el
proceso de transición, no estará al frente de la toma de decisiones
del equipo, algo que también ha ayudado a desdramatizar los
rencores de su anterior relación con Fernando Alonso.
En definitiva, el potencial de la nueva estructura McLaren-Honda
es muy elevado. En Japón se han tomado muy en serio la inversión
necesaria para que haya opciones de pelear las victorias contra
Mercedes, pero no cabe duda de que hasta que se midan sobre el
asfalto en igualdad de condiciones nadie podrá evaluar realmente su
rendimiento. A pesar de que hablan de un primer año de rodaje sin
plantearse objetivos, en el fondo todos (McLaren, Honda y Alonso)
saben que no se pueden permitir no ser competitivos desde el primer
día. Veremos si lo consiguen.
Segundas nupcias sin suerte
El proyecto McLaren-Honda suena a éxito simplemente con
nombrarlo, por el simple hecho de que recuerda a los triunfos y
dominio que la escudería logró con los motores japoneses durante la
segunda mitad de los años 80. Sin embargo, este legado histórico no
garantiza nada y el mejor ejemplo lo tenemos en el equipo Williams,
que este año ha resucitado hasta acabar en tercera posición de la
clasificación de constructores con el nuevo motor Mercedes. Pero a
quienes sus dos años anteriores con Renault (misma mecánica con la
que Red Bull arrasaba) casi les cuesta la desaparición. Nada que
ver con lo que esa misma asociación había conseguido a comienzos de
los años 90 en los que fueron el equipo de referencia.
La pesadilla del retorno
Desde el punto de vista de un piloto, volver a una escudería en
la que ya compitió puede convertirse en una incontrolable arma de
doble filo. Lógicamente, ni el piloto ni el equipo son los mismos
del primer encuentro. No tiene por qué ser ni mejor ni peor, pero,
inevitablemente, ambos habrán cambiado. Si las cosas van bien se
olvidarán rencores pasados y se alabará la confianza mutua
depositada en esa segunda oportunidad. Pero si los resultados no
llegan las cosas se pondrán muy feas... Kimi Räikkönen representa
el mejor ejemplo de este último caso. El último campeón del Mundo
de Ferrari volvió a Maranello después de cinco años para reforzar
la falange italiana de cara a 2014. Sin embargo, el finlandés ha
firmado una de sus peores temporadas en la F1.