Logo Autobild.es

El Lexus LC cabrio pasa 12 horas a -18 grados para demostrar que los descapotables son aptos para todo el año

Dura prueba la que ha tenido que superar el Lexus LC Cabrio. Tras pasar 12 horas en una cámara de refrigeración industrial, con la capota replegada y a una temperatura de -18 grados, el coche fue conducido por una pista de pruebas a plena potencia. La prueba de congelación del Lexus LC cabrio pretende demostrar que los descapotables son aptos todo el año.

Hay quien dice que los cabrios son coches de poco uso; para disfrutar en días muy concretos, en los que ni hace mucho calor, ni demasiado frío. En Lexus opinan lo contrario; defienden que un cabrio es un automóvil perfecto para todas las épocas del año, incluso si el termómetro marcas temperaturas extremas como -18 grados (sí, con un menos delante) y, acto seguido, da un cambio tremendo y luce el sol com fuerza (cosas que el cambio climático puede traer...).

La prueba de congelación del Lexus LC Cabrio

Para demostrar la viabilidad de su descapotable en condiciones extremas, Lexus ha sometido al LC Cabrio a una prueba de congelación.

Lo ha metido durante 12 horas en una cámara de refrigeración con un temperatura constante de -18 grados. Concretamente, en la gran cámara climática del Millbrook Proving Ground en Reino Unido. Esta instalación de 468 m3 se utiliza normalmente para probar la resistencia de equipos de defensa y vehículos de carretera, a temperaturas de entre -60 °C y +85 °C, con una humedad relativa de hasta un 98 %.

Prueba congelación Lexus LC Cabrio

Para la prueba de congelación del LC Cabrio, el mercurio se bajó a -18 °C, temperatura suficientemente fría para congelar el caucho, y el estándar de la industria para evaluar el rendimiento de descongelación. "A fin de añadir dificultad a la prueba, antes de introducirlo, se roció el Lexus con agua para que se formara una capa de hielo sobre la carrocería del vehículo", explican.

Tras el frío, a rodar

El objetivo no era solo ver si el coche, en general, y los elementos interiores, en particular (recordar que la capota estuvo guardada durante toda la prueba) soportaban el frío extremo. Los ingenieros de Lexus también quisieron comprobar el funcionamiento del coche inmediatamente después de pasar 12 horas literalmente congelado.

Prueba congelación Lexus LC Cabrio

La marca japonesa contrató a Paul Swift, conductor de acrobacias profesional. A la voz de “acción” del equipo, el motor V8 de 457 CV se encendió por primera vez y las pantallas y los indicadores del automóvil cobraron vida al instante, sin mostrar ningún efecto adverso ocasionado por el frío extremo. ¿Todo bien? Todo bien. Swift asegura que fue realmente reconfortante sentir en cuestión de segundos el calor del sistema de climatización y que la respuesta general del Lexus LC Cabrio fue impecable.

Descubre más sobre , autor/a de este artículo.

Conoce cómo trabajamos en Autobild España.