Tom Cruise sacará el polvo a su vieja GPZ900R en Top Gun 2: Maverick

Top Gun 2: Maverick se estrenará en los próximos meses y después de ver el trailer oficial, ya estamos deseando volver a ver las aventuras en el aire de Tom Cruise. Sin embargo, esta noticia tiene poco que ver con los F/A-18 Hornets que llevarán al límite en los cielos, sino con lo que pilotarán sobre la tierra. Sí: la mítica Kawasaki GPZ900R volverá a proporcionar mucha felicidad al piloto Pete Maverick Mitchell.  

Te interesa: Kawasaki ZX-10R 2019

Y es que a priori, una película enfocada en el ejército del aire de EEUU y en en exhausto entrenamiento de pilotos, poco tiene que ver con los petrolhead de dos ruedas. Ahora bien, si te digo que habrá una ‘drag race’ entre esta Kawasaki y un caza F18, ¿la cosa cambia, verdad? Sin duda, esta película será interesante para todos los que tenemos gasolina en nuestras venas.

La Kawasaki GPZ900R, tal como aparece en el trailer que puedes ver sobre estas líneas, está bien guardada en un hangar, acumulando polvo, pero por supuesto, todavía tiene mucha emoción que proporcionar a su dueño. Sin duda, la icónica imagen de Tom Cruise, sin casco, con sus Rayban, a lomos de la GPZ900R y enfrentándose a alta velocidad a un avión de combate. ¿Puede haber algo más molón? Hombre, desde el punto de vista americano, seguro que una Harley-Davidson habría sido más apropiada.

Lo que está claro es que Top Gun 2: Maverick será una de las películas de acción del año, si te gusta la velocidad y la acción. La primera película se convirtió en un icono del cine, especialmente en EEUU, donde el éxito fue tal, que las inscripciones a las academias del ejército del aire aumentaron considerablemente, mientras que Tom Cruise protagonizó buena parte de las portadas de las carpetas de las adolescentes y se consagró como una estrella del cine.

Tocar una película tan mítica y repetirla más de 30 años después, sin duda tiene un riesgo importante. Sin embargo, viendo el trailer de Top Gun 2: Maverick y viendo a la Kawasaki GPZ900R, da la sensación de que estamos ante una película tremendamente entretenida.