Hablamos con el CEO de Volkswagen, que no cree que el hidrógeno sea una opción viable de futuro para el coche de pasajeros

En nuestra visita al CES de Las Vegas tuvimos la oportunidad de entrevistar a Thomas Schäfer, CEO de Volkswagen. El también director de las Marcas de Volumen del Grupo Volkswagen (Seat, Skoda y VW) estuvo en la presentación de la última novedad de la firma alemana: el Volkswagen ID.7, vehículo que será la primera berlina eléctrica de la compañía y el sexto modelo de la familia ID.

AUTO BILD: En 2026, la gama eléctrica será completada por cuatro coches más, sumando un total de diez. Es clara la apuesta que está haciendo el fabricante de Wolfsburgo por el coche eléctrico, pero ¿hay espacio para una tecnología como es el hidrógeno, más aún cuando otras marcas como Toyota, Hyundai o BMW están trabajando con él? 

Thomas Schäfer: "El hidrógeno no es para nosotros". 

AB: Quizá a partir de 2026... 

TS: "No. El hidrógeno es física pura y es costoso. No es competitivo, y menos para los automóviles de pasajeros, cuyos tanques restan espacio en el habitáculo. Quizá para los vehículos comerciales, pero no en el coche de pasajeros. Así que no veo que esto suceda en esta década. No en Volkswagen".

AB: Lo cierto es que la industria del automóvil vive un periodo complicado debido a los numerosos cambios que está sufriendo, muchos a marchas forzadas y por obligación. ¿Es complicado manejar a la vez el coche eléctrico y el conectado?

TS: "Es un reto manejar ambos a la vez. Tienes que seguir con el desarrollo de los vehículos clásicos, pero también el de los conectados: software, arquitectura y seguridad. Pero a la vez tienes que invertir en la producción de baterías. Es cierto que una vez que esto termine, se trata de una tecnología que se tiene que observar y desarrollar más, pero que cuando podamos centrarnos únicamente en ella, será sencillo".

AB: Las plantas de Martorell y Landaben siguen funcionando a pleno pulmón, cuando la escasez de chips se lo permite. Además, se suma la de Sagunto. ¿Cuál es el futuro de las tres fábricas españolas? 

TS: "Como sabes, vamos a traer los vehículos eléctricos pequeños a España. Vamos a dividirlos entre Martorell y Pamplona. Invertiremos en ellas. Y al mismo tiempo construimos la fábrica de baterías en Valencia. Eso es para España un gran éxito que, dentro del entorno actual, fue muy visionaria ayudando a la industria automotriz en su transformación. Yo diría que España es, probablemente, el país que más ha avanzado dentro de Europa en esa materia, y eso ha sido muy bueno".

AB: Lo que está claro es que cada vez existen más marcas chinas en territorio europeo, y a diferencia de antaño, con productos de calidad. ¿Cuáles son los factores clave que hacen que la industria europea sea más competitiva y más efectiva que la china? 

TS: "Mira, siempre estuvo claro que la competencia china llegaría a Europa. Lo mismo ocurrió con la llegada de las japonesas o las coreanas. Los chinos han hecho un gran avance con nuevas empresas que están creciendo muy rápido. Siempre estuvo claro que eventualmente vendrían a Europa, y la electrificación es, obviamente, su oportunidad también para poner un pie en Europa e invertir aquí".

"La competencia es buena. Es lo que nos mantiene en nuestro estado de ánimo de lucha. Así que tienes que ayudar y luchar. Pero tampoco es fácil para ellos. Algunos necesitan comenzar desde cero en un mercado que entienden muy poco, y que, como ya sabes, nosotros tenemos una gran infraestructura en términos de concesionarios y de marcas con herencia que ellos no tienen. Es competencia. No es malo".

AB: El paso a la electrificación ha sido acogido mejor o peor, dependiendo del país. En los del sur de Europa, excepto en Portugal, el cambio de mentalidad aún no ha sido completo. ¿Qué aceptación han tenido los clientes de Volkswagen? 

TS: "Lo bueno es que tenemos una base de clientes muy leales que también se están transformando, pasándose de los vehículos con motor de combustión a los eléctricos. Ahora es lo popular". 

"En los últimos 12, 18 meses hemos visto que muchos de nuestros clientes tradicionales se han acercado a los vehículos con batería y están totalmente satisfechos con ellos. Se ha convertido en la corriente principal. De todos, nosotros somos los que llevamos esta tecnología a un volumen real. Ahora lo hacemos con todas las marcas, no solo con Volkswagen, también con Skoda, Seat, Cupra. Así que llegaremos a un volumen que el resto no puedan. Es cuestión de tiempo. De hecho, este año podríamos haber aumentado la cifra si no hubiésemos tenido el problema con los semiconductores. Hubiéramos tenido un año realmente bueno".

AB: Pero no todo es electrificación, porque el coche del futuro también será autónomo. ¿Se sigue trabajando en esta tecnología? 

TS: "Estamos trabajando intensamente en la conducción autónoma para liderar con nuestros vehículos comerciales de Volkswagen. Nuestro equipo en Hannover está trabajando en vehículos totalmente autónomos para el transporte como servicio, la movilidad como servicio y los sistemas sin conductor". 

"Al mismo tiempo, obviamente, estamos aprendiendo sobre el nivel 2 y 3 de conducción autónoma, pero para los automóviles de pasajeros puros de uso privado no esperamos nada nuevo en los próximos dos o tres años".

"Este es un desarrollo de largo alcance. Los costes son altos, muy altos. ¿Es posible desde un punto de vista tecnológico? Sí. Pero desde un punto de vista legislativo tienes que demostrar intensamente que el sistema conduce mejor que un humano. Así que es un procedimiento bastante complicado que probablemente tomará algunos años para lograrlo, pero todos lo lograremos".