Con estos consejos podrás ahorrar hasta 10 euros cada vez que llenes el depósito

Decir que el precio de los carburantes está registrando máximos históricos en las últimas semanas no es decir nada nuevo. Además, la invasión rusa de Ucrania no ha hecho más que incrementar la presión sobre ello. Por eso, la noticia ya no es tanto el encarecimiento, sino la forma de aliviarlo. 

¿Qué podemos hacer para lograr pagar algo menos? Hemos hablado con varios expertos para hacer una recopilación de consejos con los que podrás ahorrar hasta 10 euros cada vez que llenes el depósito.

1. Busca las gasolineras más baratas

No hay mejor opción para ahorrar que repostar en los establecimientos con precios más bajos. Son muchos los comparadores de precios de carburantes que muestran que en una misma provincia hay diferencias de hasta 12 euros para un depósito medio.

Supone esto que con solo echar un vistazo a webs como Casacochecurro.com o el portal oficial de precios de carburantes podemos conseguir el objetivo de ahorrar hasta 10 euros al llenar el depósito. 

Las cinco gasolineras más baratas

Para ser del todo rigurosos no podemos obviar que ese ahorro será menor cuanto mayor sea la distancia entre la gasolinera que usamos de manera habitual y la que tiene el precio más bajo.

2. Únete a una compra colectiva

La compra colectiva es una iniciativa pensada para reducir gastos. La fórmula es sencilla: negociar un precio más bajo con una determinada cadena de estaciones de servicio a cambio de que esta ofrezca precios más bajos. 

La organización de consumidores OCU impulsa desde hace tiempo este tipo de compra común. Bajo el lema "Quiero pagar menos por la gasolina" en ediciones pasadas ha conseguido hasta siete céntimos de descuento por cada litro de carburante.

3. Reposta los lunes, no los sábados

Qué día de la semana acudes a la gasolinera influye en lo que pagas por repostar. Se explica esta diferencia por algo tan básico en economía como es la ley de la oferta y la demanda. Esta determina que, cuanto mayor es la demanda de un producto, más alto será el precio al que se oferte. 

"Las marcas distribuidoras suelen aprovechar los patrones de movilidad colectivos para ajustar sus políticas comerciales, de manera que los días de mayor demanda los precios son más altos", explican expertos del RACC.

El mejor y el peor día de la semana para llenar el depósito

Los lunes son el mejor día de la semana para llenar el depósito ya que es cuando se registran los precios más bajos. A medida que avanza la semana, las cifras van aumentando hasta llegar al sábado que es el peor día de la semana para repostar, pues los precios son más elevados

4. Anticípate a las 'operaciones salida'

Por la misma razón por la que el litro de gasolina y gasóleo se encarece cuando llega el fin de semana, lo mismo sucede antes de lo que la DGT denomina Operación Salida; es decir, los días previos a vacaciones o puentes.  

Si en lugar de llenar el depósito antes de salir de viaje lo haces dos días antes, ahorrarás.

5. Practica la conducción eficiente

Este es el consejo de los consejos (porque aglutina varios en uno). Se basa en una realidad palpable: cuanto menos gaste tu coche, menos tendrás que repostar y, por lo tanto, menos gastarás en carburante al final del mes. 

La conducción eficiente es un conjunto de técnicas muy fáciles de aplicar que reducen el gasto de carburante; a continuación resumimos algunos de los preceptos que marcan los expertos de la DGT:

1. Salir sin acelerar. No es necesario pisar el acelerador al arrancar: consume carburante inútilmente. 
2. La 1ª, solo para salir. Utilizar la primera velocidad para iniciar la marcha, sin abusar del acelerador; y pasar a segunda tras dos segundos o 5-6 metros recorridos
3. Anticipar el cambio. Acelerar de forma progresiva, sin pisar el pedal a fondo. En motores de gasolina, se debe cambiar de velocidad entre las 1.500-2.500 revoluciones; en los diésel, entre las 1.300-2.000
4.  Marchas largas. Se deben utilizar marchas largas a bajas revoluciones el mayor tiempo posible
5. Velocidad constante. Conducir a una velocidad lo más uniforme posible, sin acelerar ni frenar innecesariamente, reduce el consumo de energía y combustible
6. Moderar la velocidad. No sólo por seguridad: el aumento de la velocidad implica un aumento mucho mayor del consumo de combustible y hace que este se dispare.
7. Freno motor. En las deceleraciones, levantar el pie del acelerador y dejar rodar el vehículo con la marcha engranada. El motor actuará como freno y el consumo será cero
8. Pendientes. En las subidas, conviene retrasar –en lo posible– la reducción de marchas y acelerar ligeramente. En las bajadas es más eficiente circular en marchas largas y rodar por inercia, evitando siempre cualquier situación de riesgo

La conducción eficiente es tan importante que la nueva Ley de Tráfico regala dos puntos a los conductores que hagan un curso de conducción segura y eficiente.

6. Revisa el vehículo

Siguiendo con el mensaje anterior, otra forma de reducir el gasto de combustible pasa por revisar el vehículo.

Unos neumáticos excesivamente desgastados o con menos presión de la recomendada por el fabricante aumenta el gasto de carburante.

Lo mismo sucede si algunos componentes mecánicas no están en perfecto estado.

7. Durante el viaje...

Cerramos este recopilatorio de consejos para ahorrar en carburante con una serie de recomendaciones a tener en cuenta antes y durante el viaje.

Una de ellas es planificar la ruta con antelación. Por dos razones. La primera, para evitar atascos: si evitas las carreteras más congestionadas y optas por otras con menos tráfico ahorrarás en combustible (siempre y cuando no sumes muchos kilómetros más). La segunda, porque conocer la ruta con antelación evita errores que hagan sumar kilómetros. 

También es importante no pasarse con el equipaje: el peso extra y los portaequipajes de techo pueden aumentar el consumo hasta un 40%.

Durante el trayecto controla el sistema de climatización. Una temperatura adecuada en el interior del habitáculo es importante para viajar con seguridad; pero a veces usamos la climatización más de la cuenta sin saber que la lunetas térmicas, calefacción y sobre todo aire acondicionado incrementan el consumo, hasta un 25%.

Recuerda también que las ventanas abiertas aumentan la resistencia al avance y consumo extra del 5%.