BMW X5 M50i, 530 CV de músculo
M es sinónimo de poderío en BMW, marca en la que hasta sus modelos más grandes reciben versiones de altas prestaciones. En el caso del BMW X5, que no es que lleve mucho en el mercado, ésta lleva el nombre de BMW X5 M50i, que llega de la mano de una variante con idéntica denominación para su hermano mayor, el X7.
El principal protagonista de esta versión es su motor, un bloque 4.4 V8 biturbo de 530 CV de potencia y 750 Nm de par máximo, que se combina con una caja de cambios automática de ocho velocidades y con el sistema de tracción integral a las cuatro ruedas xDrive.
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Sobre el cambio Steptronic la marca destaca la función Launch Control, pensada para tener arrancadas más rápidas. De la tracción, por otra parte, señala que su orientación es principalmente al eje trasero, pero que también puede mandar hasta el 100% de la fuerza al delantero, mientras que incluye de serie el diferencial deportivo M. Gracias a dicha configuración es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 4,3 segundos.
No paran ahí las bondades del BMW X5 M50i, que también monta una suspensión adaptativa M, que puede optar entre dos modos, Comfort y Sport. Tampoco falta la dirección activa integral, aunque de forma opcional, que mejora la estabilidad del modelo a altas velocidades y su agilidad.
De su imagen la marca dice que el frontal cuenta con grandes tomas de aire, pero lo cierto es que no se han desvelado imágenes que muestren la delantera. También se apunta que tanto los faldones laterales como el spoiler trasero son específicos, mientras que en el habitáculo tiene tapicería de cuero Vernasca, acabados de madera, embellecedores de aluminio, umbrales de las puertas retroiluminados, volante de cuero M y una palanca de cambios distintiva.
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